Diego González pasó este martes por el Sanedrín de la Cadena SER en el restaurante Raff. El novel central del Málaga ha restado importancia a la derrota sufrida ante el Éibar y se muestra seguro de que el equipo levantará pronto el vuelo.
"Fue un día difícil. Irnos 0-1 delante de nuestra afición siempre duele y no le gusta a nadie. Se irán haciendo ajustes durante la semana, es duro empezar así pero esto es fútbol, la Liga es muy larga y quedan muchos partidos. Hay que seguir mejorando y hay que levantarse lo antes posible", explicó.
El zaguero también se refirió a la apuesta de Míchel por jugar con una línea de tres centrales en defensa: "Poco a poco hemos ido mejorando con el sistema de tres centrales que ha propuesto el míster. Hay que confiar siempre en la idea del entrenador y defenderla. Es un sistema que particularmente me gusta". Y elogió al técnico: "Míchel es un entrenador cercano y hace sentir cómodo al vestuario".
Diego repasó su trayectoria como futbolista, que le ha llevado por las canteras de Cádiz y Sevilla hasta desembarcar en La Rosaleda. En el Pizjuán debutó en Primera y el club hispalense no pierde la fe en su potencial. De hecho, se ha reservado una opción de recompra de cinco millones de euros para las próximas tres temporadas: "Estoy muy agradecido al Málaga por haberse fijado en mí y de estar en este equipo y en esta ciudad. Tenía otras ofertas, pero me fijé en el Málaga y es la que más me gustó. El Sevilla ha intentando asegurarse entre comillas la recompra, pero yo estoy aquí, mi equipo es el Málaga y he firmado cuatro años para hacerlo lo mejor posible aquí todo este tiempo".
El central habla así de sus compañeros de demarcación: "Me voy fijando y voy aprendiendo de mis compañeros. Intento aprender de todos. ¿Luis Hernández? Tiene muy buenas características y es un muy buen central. La adaptación ha sido muy fácil y todos me han acogido muy bien".