Rostros serios tras la debacle en Mestalla
El Málaga volvió al trabajo este miércoles en el Anexo de La Rosaleda. Míchel dirigió una suaves sesión de entrenamiento en la que los titulares hicieron trabajo de recuperación en el gimnasio y en el que predominaron las caras largas y un ambiente serio.
El técnico mantuvo una charla con sus futbolistas antes del entreno y mostró un semblante muy serio durante toda la sesión. El técnico y sus jugadores son conscientes de la dificultad de la situación y tratan de recuperar el ánimo con vistas al decisivo encuentro del sábado ante el Athletic.
Tras la charla del técnico, los titulares pusieron rumbo al vestuario y el resto se ejercitó a mayor intensidad. Por delante, 72 horas para preparar un partido que puede ser determinante para el devenir a corto plazo del equipo y del entrenador madrileño.