Fernando Peralta, Álvarez y el derbi andaluz del buen rollo
Un malagueño que hizo carrera en el Sevilla, Fernando Peralta. Un sevillano que durante cuatro temporadas lideró la zaga del Málaga CF, Antonio Álvarez. Juntos jugaron en el Pizjuán y en La Rosaleda (dos años en Málaga y dos en Sevilla). Ambos fueron reconocidos en territorio comanche. Y juntos se abonan al buen rollo en la víspera del duelo que este sábado se celebrará en Nervión.
"Somos andaluces" es el lema de un vídeo distribuido por los dos clubes en la víspera para rebajar tensión y fomentar la cordialidad. Será difícil porque los partidos ya se saben que son muy calientes, pero el portero rondeño y el defensa sevillano parten su lanza para que no pase nada en la grada y para que todo esté sobre el césped.
"Siento pena, porque estamos hablando de dos equipos andaluces, que tenemos que estar más unidos. Cada uno en el terreno de juego por su lado, pero en la grada cada uno se tendría que dedicar a su equipo y respetar al contrario, y más siendo andaluces", dice Antonio Álvarez, elegante defensa central que fuera después entrenador del Sevilla y que simbólicamente dice que "debería haber una alfombra roja de Málaga hasta aquí para que se sintiese la afición como en casa, para que disfrutase de Sevilla antes y después del partido. Cordura, respeto... Sería ideal ir a La Rosaleda y Pizjuán con tranquilidad, como le gustaría a Gallardo, por ejemplo, que se vivieran estos partidos, que disfrutasen cada minuto, cada partido".
En la misma línea se expresa Fernando Peralta. "Soy malagueño y he recibido el afecto y cariño de los sevillanos. Me molestan muchísimos los insultos. Me gusta que ambos equipos se respeten, que los aficionados del Sevilla pudiesen venir con tranquilidad a La Rosaleda e igualmente el malaguista en el Pizjuán para que disfrutase de Sevilla también. Tenemos los recuerdos de Antonio Puerta y José Antonio Gallardo, que recibimos la felicitación del Sevilla cuando inauguramos la puerta en su memoria. Aunar esa ilusión por el fútbol y por la deportividad sería ideal", remacha el antiguo meta.