Miguel Torres ha querido tener un detalle con los pequeños guerreros de la planta de Hemato-Oncología del Hospital Materno-Infantil que luchan por superar su enfermedad. Un día después de rubricar su renovación hasta 2020, el futbolista blanquiazul acudió, por iniciativa propia, al centro hospitalario: “Son unos grandes luchadores. Muchas veces, en nuestra profesión, nos hablan de trabajo, esfuerzo y sacrificio. En estas situaciones, ellos nos pueden enseñar muchas cosas”.
Torres repartió camisetas malaguistas con el número ‘23’ y su nombre serigrafiados, bufandas, balones y postales, entre otros regalos, todos ellos adquiridos por él mismo. Los niños y niñas disfrutaron de la visita y se fotografiaron con uno de los ídolos del equipo malagueño. También sus familiares, que disfrutaron viendo la felicidad de sus allegados.
“Es una experiencia preciosa. Yo la vivo desde muy dentro. Creo que hemos echado un buen rato con los niños y niñas. Se han animado un montón. Cualquier detalle que tengamos con ellos lo agradecen mucho”, señaló el jugador malaguista, que estuvo acompañado por Basti, representante de la Fundación del club.