El sueño de Sandro sigue latente

El Málaga no pierde de vista a Sandro Ramírez. Es verdad que las prioridades son otras (ahora mismo un pivote defensivo) y que apenas quedan monedas en la hucha, pero el sueño de su regreso en el mercado de invierno sigue latente. No será una empresa ni muchos menos fácil, aunque los trabajos para acercarlo de nuevo a Martiricos se cuecen a fuego lento y se cuenta de partida con las voluntades de ambas partes.

El principal escollo es el económico. Si Sandro quiere volver debe ser en unas condiciones asumibles para el Málaga. El jugador tendría que hacer una apuesta más por lo deportivo que por lo dinerario. Como se suele decir, dar un paso atrás para dar después dos adelante. El canario no pierde la esperanza de jugar el Mundial de Rusia, aunque sus mínimas opciones se desvanecen del todo si sigue a cero en el Everton. Otro problema es su buen cartel en LaLiga Santander y el interés creciente de varios clubes en sus servicios, entre ellos el Valencia.
Pero el Málaga y Míchel saben de buena mano que Sandro quiere volver. Así se lo ha hecho constar de una forma directa e indirecta. De hecho, la comunicación entre el técnico madrileño y el canario no se ha detenido desde su salida de Martiricos. Sandro, además, ha mostrado sus intenciones a sus excompañeros cercanos del vestuario y ha lanzado guiños en las redes sociales. Las miguitas de pan siguen en el camino de ida.
El director deportivo Mario Husillos estuvo la pasada semana en Inglaterra aunque, según ha podido saber ElDesmarque, no fue por un tema relativo al delantero. Porque en esta mesa de negociación, aún sin cartas sobre la mesa, hay un tercer comensal, el Everton. De partida, y con la llegada del nuevo entrenador, Sam Allardyce, hay pretensiones (públicas) de recuperarlo para la causa, pero en el partido de este fin de semana ante el Liverpool, Sandro volvió a quedarse fuera de la convocatoria. Su participación en los últimos dos meses en la Premier se reduce a sólo 14 minutos y su salida en invierno parece cantada. ¿Al Málaga? El sueño sigue latente.