Fue el primero en salir en el mercado de invierno. Se trataba de uno de los jugadores más cotizados de la devaluada plantilla del Málaga. Equipos de primera fila de Argentina tantearon el regreso a su país, pero fue el Club León, propiedad del poderoso Grupo Pachuca, quien más apostó por la cesión de Emanuel Cecchini, abonando incluso un pequeño concepto económico y asumiendo su elevada ficha. Mes y medio después, su fichaje ya es criticado en México.
La verdad es que Cecchini no entró con buen pie. Al igual que le ocurrió con Míchel en el Málaga, el entrenador del Club León tampoco avaló su fichaje. “No hablé con él, es una recomendación del club”, señaló entonces Gustavo Díaz. Decía poco, pero a la vez mucho el técnico cuando se le cuestionó por la llegada del argentino. A día de hoy, cuando se está a punto de alcanzar el ecuador del Clausura mexicano, la relación entre ambos es muy mejorable.
Cecchini apenas juega en México. Entró tarde en la rueda por un tema de papeles, pero no ha logrado ganarse la confianza de Díaz. De hecho, su debut liguero se produjo la pasada semana en la dolorosa goleada sufrida ante el Santos Laguna (5-1). Cecchini fue titular, jugó 62 minutos (tenía algunas molestias físicas) y al siguiente partido de la ‘Fiera’, este fin de semana ante el Querétaro, no fue ni convocado, algo por otra parte habitual en los últimos duelos a excepción del referido anteriormente. Sus participaciones hasta su debut se reducían a dos partidos de Copa ante el Cafetaleros y el Venados.
“Vienen sin ritmo de juego en los últimos meses, es complejo porque no juegan porque no tienen ritmo, pero si los pones y no ganas... a nosotros nos están pidiendo resultados”, expresó Gustavo Díaz cuestionado por Cecchini y otros dos fichajes casi inéditos del León, duodécimo clasificado y equipo más goleado del campeonato mexicano. Allí tampoco termina de cuajar el bueno de ‘Ema’, un joven de 21 años al que se le presupone futuro, pero que le costó al Málaga este verano 4,6 millones de euros brutos más otro 'kilo' en variables y hasta porcentajes de plusvalías… Igual es demasiada losa para el propio futbolista.