Samu Castillejo pasó inadvertido este domingo en La Rosaleda. El rombo de Calleja no parece exprimir su fútbol, más de desborde por fuera, y el malagueño fue sustituido en el minuto 61. Cuando se marchaba al banquillo recibió la ovación de La Rosaleda, feliz por el resultado momentáneo y que había mostrado antes su división por el regreso de Fornals. Con Samu el respetable fue unánime. Hubo palmas y cariño pleno.
El futbolista, que durante la semana previa volvió a exhibir su malaguimo, empleó su perfil de Instagram tras el encuentro para mostrar su gratitud: “Qué bonito es volver a tu tierra, a tu ciudad, donde tantos buenos recuerdos y amigos guardo aún. Muchas gracias por el recibimiento malaguistas”.
Sobre el partido en sí, explicó: “El resultado no fue el que queríamos pero este equipo siempre se levanta”.