No ha podido concluir la temporada en La Rosaleda de peor manera: con derrota. El Málaga no pudo reponerse al gol de penalti de Remy, que le valió al Getafe para llevarse los tres puntos. Como Manuel Iturra ha explicado a pie de césped al concluir el encuentro, "ésta ha sido la tónica de todo el año".
Iturra, que actuó dignamente como lateral izquierdo, ha señalado en beIN Sports que "no ha podido ser, ha sido la tónica de todo el año, tengo pocas palabras para dar explicaciones y para describir el momento que estamos pasando".
Además, ha calificado la temporada de "lamentable", ya que "nadie se esperaba bajar a Segunda División, todos los años uno arma el equipo con aspiraciones mucho mayores y hay que hacer un análisis de cómo ha sido esto e intentar subir lo más rápido posible porque ya sabemos lo difícil que es la Segunda división".
Tras esta nefasta campaña, reconoce que la sensación "no sólo es agotamiento", "son varios sentimientos negativos cuando ya quedamos matemáticamente en Segunda, nos descolgamos muy pronto de los equipos que estaban en Primera".
Y ha reconocido que el futuro del club está lleno de incógnitas: "Me he despedido de pocos compañeros, no sabría decirte cuántos jugadores habrá el año que viene de los que hay ahora, hay un poco de incertidumbre, espero que haya cosas concretas pronto. Al final, para bien o para mal, lo peor es la incertidumbre".
Por último, sobre el brazalete, que portó este sábado ante la ausencia de los cuatro capitanes, finalizó: "Para mí es un orgullo llevar el brazalete, me hubiera gustado que hubiese sido por mis compañeros y no porque me lo ha pedido el míster, pero lo he acatado con alegría y con la responsabilidad que ello conlleva".