El Málaga vive un momento clave en su presente y futuro más cercano. El abogado del club, Joaquín Jofre, ha viajado a Catar para reunirse con el propietario y presidente, Al-Thani, para desbloquear la planificación. El todavía director deportivo, Mario Husillos, espera una decisión respecto a su futuro después de que comunicara su intención de no seguir en el cargo debido a las ingerencias del máximo accionista. Y, entre tanto, pasan los días y los jugadores con contrato en vigor para el curso 2018/2019 se han ido de vacaciones (algunos cedidos siguen compitiendo) sin saber el día de vuelta al trabajo (creen que será sobre la segunda semana de julio) ni quién hablará con ellos para abordar su relación contractual.
Los jugadores del Málaga, por muy mal que lo hayan hecho en esta temporada del descenso, se han convertido en unos espectadores más de esta situación insostenible que agita al club costasoleño. A saber, son 28 los futbolistas con contrato en vigor para la campaña venidera. En el club no saben con exactitud la fecha prevista de vuelta y ya con las vacaciones iniciadas, hay una infinidad de conversaciones que mantener con los integrantes del plantel. Huelga explicar que no todos van a seguir y dependerá muchísimo de las intenciones del próximo responsable deportivo.
Los cedidos tendrán que volver y los que tiene contrato en vigor esperan a tener un interlocutor válido para conocer de primera mano las intenciones de la entidad. Hay jugadores que no seguirán y otros que han comunicado que no quieren seguir en su círculo más íntimo pese a tener contrato. Uno de los aspectos claves del descenso a Segunda, es que la mayoría de los futbolistas cobrarían la mita, salvo algunas excepciones.
Todo indica que si la reunión en Catar de Jofré con Al-Thani es fructífera, los acontecimientos deben llegar en cascada. Se produciría la salida de Husillos y se confirmaría la llegada de Juan Ramón López Muñiz. No habrá novedades definitivas a lo largo del día hoy, al menos, eso creen los protagonistas de tremenda situación.
Que los mercenarios tengan incertidumbre, después del daño que nos han hecho, me da exactamente igual. Que esperen... Lo que realmente me importa es saber el proyecto de futuro, si es que lo va a haber.