El Málaga se adelantó en Riazor, pero el Dépor logró la igualada 20 minutos después. Poco después del 1-1, cuando los locales más confianza tenían, el colegiado del encuentro expulsó a Quique González, que dejó con diez a su equipo. Díaz de Mera vio clara la patada en la cabeza del delantero a Luis Hernández en su intento de chilena y no dudó en mostrarle la tarjeta roja directa. Una decisión controvertida muy protestada por los jugadores deportivistas y por la grada. La acción, en el vídeo superior.