Había expectación por saber si Munir y N'Diaye llegaban a tiempo para disputar el Elche-Málaga de este viernes. Y lo hicieron. Ambos fueron de la partida en el Martínez Valero, pero no ofrecieron su mejor versión sobre el césped del estadio ilicitano. Pudieron pesar los kilómetros de tantos viajes y también los minutos en las piernas. El caso es que ni el meta marroquí ni el mediocentro franco-senegalés estuvieron demasiado acertados.
El portero blanquiazul llegaba al duelo con sólo un entrenamiento esta semana. Fue este jueves, una sesión que acabó antes de lo planeado por la tremenda tromba de aguada que cayó sobre La Rosaleda. Antes, había jugado en Comores con Marruecos el martes, por lo que la odisea de viajes para volver a la Costa del Sol fue importante. Por este u otros motivos, no se vio al mejor Munir ante el Elche. El portero de Melilla estuvo a punto de parar el primer gol de los locales, pero no puso la mano del todo dura y el cabezazo de Lozano acabó en el fondo de las mallas. En el segundo tanto sí que pudo hacer bastante más. El meta se confió en una falta a favor del Elche, puso sólo dos hombres en la barrera y no se posicionó bien. Todo eso lo aprovechó Borja para, dicho sea de paso, sacarse un gran zurdazo y batir por alto a Munir.
Tampoco estuvo fino N'Diaye, que fue titular y jugó el partido completo pese a no haber entrenado esta semana. El mediocentro llegó a Elche directamente este jueves procedente de Dakar y con escala en París tras jugar en Sudán el martes. Aun así, Muñiz apostó por él para acompañar a Adrián en la medular en el Martínez Valero. No se vio a ese N'Diaye dominador ante el Elche. El equipo tampoco le acompañó. El Málaga estuvo gris en todas las facetas del juego, incluido en la sala de máquinas. Y al franco-senegalés se le vio desubicado por momentos, errando controles a priori sencillos y sin estar demasiado preciso en el pase.
Juan Ramón Muñiz se refirió a este asunto en rueda de prensa tras el encuentro: "Ahora hay diez días de espacio entre un partido y otro. Haremos descanso, que viene bien para los jugadores que vienen de viaje. Se habló con ellos, vinieron en buen estado, sin ningún golpe o cuestión que le impidiera jugar. Firmaría que los dos meses siguientes fueran como los anteriores, pero es muy complicado. Valoro lo que hemos hecho. Si volvemos a repetir otra rachita de esas...".
Por contra, los internacionales del Elche fueron decisivos. Francis, portero nigeriano que acudió con su selección en la pasada fecha FIFA, fue clave con varias paradas de mérito que salvaron a su equipo en diferentes momentos del encuentro. También hizo un buen partido Sory Kaba, máximo goleador franjiverde. No marcó el guineano, pero trajo loca a la defensa malaguista e hizo un trabajo de desgaste importante.