Se marchó Lacen, cuya desvinculación no llegó a oficializar el Málaga, y también lo va a hacer Ricca, que jugará cedido en el Brujas belga en su último año de contrato con el club blanquiazul. Dos de los tres capitanes del curso pasado abandonan la disciplina malaguista, por lo que se deberán buscar dos nuevos líderes que acompañen a Adrián González en ese núcleo duro del vestuario.
Hace ahora un año, el pasado verano, Juan Ramón Muñiz optó por una profunda renovación en la capitanía del Málaga tras el dramático descenso. Recio, Rosales y Miguel Torres dejaron de ser capitanes (ninguno de los tres pertenece ya a la entidad) y el asturiano optó por dar galones a Ricca, Adrián y Lacen, por ese orden. Ahora, el primero no está y el tercero se va a marchar al Brujas belga, por lo que la renovación este año es obligada.
El charrúa, pese a su juventud, llegó al club en el mercado invernal de 2016 y siempre demostró compromiso. Pero el primer capitán de la 2018/19 ha decidido acogerse a esa cláusula que le permite salir cedido a un equipo de Primera y la próxima campaña jugará en el Brujas, a la espera de que el presidente Al-Thani firme para que se oficialice el préstamo. Será su último año de contrato, pues finaliza en 2020, por lo que a partir del 1 de enero será libre para negociar y firmar por cualquier club.
Si Adrián González forma parte del plantel la temporada venidera como parece, lo normal sería que el madrileño asumiera el papel de Ricca y pasara a ser primer capitán, por experiencia, por galones y por importancia en el equipo, tanto dentro como fuera del terreno de juego. Pero Víctor Sánchez del Amo deberá buscar otros dos 'jefes' para el vestuario, tarea complicada de acometer a día de hoy ante los numerosos cambios que deben darse todavía en la plantilla cara a la 2019/20.
Cifu y pacheco
Gönen y Ceccini
Juankar, Luis H
Juankar y cifu
Munir y Luis Hernández