La afición vuelve a protestar contra Al-Thani

El malaguismo, tal y como ocurriera el pasado 9 de agosto, volvió a darse cita en los aledaños de La Rosaleda para alzar su voz contra la gestión de la propiedad del Málaga CF, encabezada por el presidente Abdullah Al-Thani. Una hora antes de la cita frente a la Almería, la explanada de Gol se pobló de varios miles de aficionados blanquiazules que comenzaron una concentración que transcurrió sin incidentes hasta la puerta de entrada al parking del estadio. Los vaivenes durante el verano llevaron a 'Fondo Sur 1904' a convocar una marcha a la que se adhirió la Federación de Peñas Malaguistas y otros grupo de animación y aficionados.

No faltaron las pancartas, algunas con más ingenio que otras, pero en definitiva con un objetivo común de protesta: el dueño del Málaga. "Al-Thani, ridículo nacional y vergüenza de Catar", expuso uno de los múltiples seguidores congregados. El "¡Al-Thani, vete ya!" también tuvo su protagonismo, justo cuando la concentración tomó más calor: "¡Málaga somos nosotros"". Los culpables para la afición quedaron señalados, todo lo contrario que un Víctor Sánchez del Amo que recibió el cariño en forma de cánticos a favor. Las pancartas, más que reveladoras del estado de ánimo de la gente: "Caminero cobarde, fuera mercenarios".

📺 "Somos nosotros, el Málaga somos nosotros". La afición blanquiazul se manifiesta en contra de la gestión de Al-Thani al frente del club pic.twitter.com/aHmJWAJpqv

— ElDesmarque Málaga CF (@eldesmarque_mcf) September 7, 2019

Desde la cercanía de la tienda oficial, subiendo por la avenida La Palmilla, los cánticos y desaprobaciones contra Al-Thani se sucedieron. Los rapapolvos no escaparon a otras figuras del club, como las de Caminero y Jofre, que no han dado a Víctor Sánchez del Amo, tal y como señaló el técnico en rueda de prensa, "el proyecto hablado". "Me siento decepcionado y enfadado", llegó a espetar ante los medios el preparador madrileño. Contra ambos hubo cánticos también este sábado.

La misma decepción que sintió el malaguismo, sobre todo en los últimos días de mercado en el que solo llegaron retoques muy concretos e inesperados, se dejó sin ficha a Iván, Mula y José Rodríguez y, sobre todo, se vio marchar al que había sido el fichaje estrella y más ilusionante, Shinji Okazaki. Un cóctel de golpes al corazón del malaguismo, que pese a la decepción el pasado curso ante el Deportivo volvió a responder durante la campaña de abonados. Mientras tanto, ni rastro de Al-Thani o sus hijos, que siguen ajenos a la realidad de la institución y que fueron los que más cánticos y protestas recibieron en la recta de Tribuna antes del Málaga-Almería.