El sportinguista Aitor, un caballero en La Rosaleda

El jugador del Sporting de Gijón Aitor García tuvo un lindo detalle con una aficionada que recibió un pelotazo durante la primera parte del encuentro. Mientras disfrutaba del encuentro sentada en su butaca de Fondo Bajo, en una acción en la que Aitor García apuró la línea de fondo, se llevó un buen golpe con el esférico, que salió directamente hacia su zona tras el centro desviado del jugador del Sporting, quien rápidamente se giró buscando el perdón con un gesto con sus manos. Gesto que repitió minutos después al asomarse de nuevo por la zona, a lo que correspondió la afición blanquiazul con aplausos.

De hecho, la aficionada tuvo que ser asistida por los miembros sanitarios que habitualmente se ocupan de estos asuntos en La Rosaleda. Por fortuna, todo fue un mero susto y pudo continuar viendo el encuentro desde su posición. A la finalización del choque, llegó el gesto del extremo del Sporting. Nada más señalar Arcediano Monescillo el final, corrió hacia la aficionada, saltó la valla que limita el verde con la grada y le regaló su camiseta. Un gesto señorial que recibió, nuevamente, los aplausos de los que allí se encontraron. "Lamento el susto del pelotazo. Espero que se recupere bien y quede en una anécdota. Gracias a La Rosaleda por su reacción", escribió después el extremo en su Twitter.