Es Noticia

El día que Basti dio un tirón en los varales del Cristo de los Gitanos

Basti y el Cristo de los Gitanos (Foto: LM Gómez Pozo).

Sebastián Fernández Reyes, más conocido por el malaguismo como 'Basti', no sólo es leyenda del Málaga CF como futbolista. También es un cofrade confeso. Nacido en la barriada de El Palo, el malagueño es devoto de la Virgen del Carmen. No obstante, tiene otra pasión, una debilidad por una imagen que recorre las calles del centro de Málaga cada Lunes Santo: Nuestro Padre Jesús de la Columna, de la Hermandad de la Columna, conocida como Cofradía de los Gitanos. El club, en un reportaje publicado en su web, ha recordado, aprovechando esta Semana Santa tan inusual -y sin procesiones-, el día en que Basti se convirtió, durante un rato, en hombre de trono de este Cristo de tez morena.

El 'Moreno', como se conoce coloquialmente a esta talla cristífera, obra de Juan Vargas Cortés y que restaurara Francisco Buiza, atrae a grandes multitudes cada Lunes Santo, sobre todo en los últimos metros de su recorrido. Antes del encierro en la casa hermandad sita en la calle Frailes, el Cristo espera a María Santísima de la O, imagen mariana de la corporación, en la plaza de la Merced. Allí, ambos tronos se levantan a pulso y 'bailan' varias marchas para gozo de los allí presentes, que estallan en vítores y aplausos para sus imágenes y sus portadores.

Y allí se encontraba Basti en aquella noche mágica que rememora con cariño. "Llegué desde Albacete, era el día de descanso, y fui expresamente a verle (al Cristo). Llegué justo al acto de la plaza de la Merced, donde los tronos del Cristo y de la Virgen se encuentran antes del encierro. Allí vi a mi amigo Fernando Palma (actual mayordomo y vestidor del Cristo) y me metió en el varal para dar un tirón. Fue algo muy emocionante para mí, increíble", confesaba Basti.

Esta historia la refrendaba el propio Fernando Palma, tercer Teniente Hermano Mayor de la Cofradía. "Basti siempre ha tenido mucha fe en el 'Moreno' y es un orgullo para la Cofradía tenerlo con nosotros, es un gran embajador. Lo conocemos desde hace muchos años y siempre ha estado al lado de nosotros, incluso cuando jugaba fuera de Málaga. Un año lo vi en la plaza de la Merced, ya casi al final del recorrido, y lo metí a dar un pequeño tirón. Fue muy emocionante, su cara lo decía todo", destacaba Palma.

Aunque tendrá que esperar un año para poder ver de nuevo en las calles al 'Moreno' y a María de la O, Basti nunca olvidará esa noche de Lunes Santo en que pudo sentir sobre sus hombros el peso del Cristo que es objeto de su devoción cristiana.

Basti, un símbolo del malaguismo

Basti es un símbolo no sólo por lo que supuso como jugador del Málaga, sino por su trabajo posterior en el club. En estos días de confinamiento por coronavirus, el paleño ha sido el encargado de hacer una videollamada a Miguel, un abuelo malaguista afectado por un ictus al que Basti ha alegrado el día. Este señor tenía en su casa una pelota blanquiazul firmada por Basti, que le ha mostrado con orgullo, y el exjugador le ha querido regalar una camiseta de esta temporada.

Escribir comentario 0 comentarios
Deja una respuesta
Su comentario se ha enviado correctamente.
Su comentario no se ha podido enviar. Por favor, revise los campos.

Cancelar