Al Málaga se le vino abajo su crecimiento, tanto deportivo como institucional -léanse la llegada del administrador judicial y los pasos hacia adelante- con la crisis del coronavirus. Sigue el club, como el resto de contendientes en LaLiga SmartBank (y resto de competiciones deportivas en España) confinado a espera de respuestas sobre cuándo podrá volver al trabajo. Pese a ello, en el Málaga se siguen tomando decisiones y varias de ellas han sido motivo de orgullo en las últimas semanas por lo que supusieron y suponen.
El Málaga decidió suspender sus entrenamientos el pasado 13 de marzo (este lunes cumplió un mes confinado). Una fecha en la que el confinamiento general no se había decretado, aunque el Málaga tomó el camino más sensato antes que otras clubes del fútbol español. Lo hizo en ese momento de forma momentánea y tres días después sí que canceló definitivamente cualquier acción deportiva.
Nada más arrancar el estado de alarma, LaLiga comenzó una monitorización al Málaga a raíz de los primeros casos de coronavirus confirmados en el fútbol nacional. Ofreció test para el COVID-19, pero el club rehusó el ofrecimiento al entender que no existía necesidad. "Creo que los hemos recibido, pero el doctor nos dijo que sólo se harían en caso de que alguien estuviese con síntomas", señaló Adrián González en la Cadena SER.
Ocho clubes de LaLiga SmartBank se han visto obligados en las últimas semanas a solicitar un ERTE. Otros, como el Huesca o el Sporting, no llegaron a tal medida pero sí que negociaron una reducción de sueldo con los jugadores. Mientras tanto, el Málaga aguanta sin acogerse a un ERTE, aunque no se descartan otras medidas drásticas cuando el virus se vaya. Todo pasa por lo que decida el administrador, José María Muñoz, para garantizar la viabilidad de la sociedad.
Desde el seno de la entidad han llegado iniciativas de todo tipo que han mostrado solidaridad y empatía con los que más sufren esta crisis. Cambió su escudo, puso a la venta una camiseta solidaria y hasta impulsó una iniciativa con la que mostrar cariño vía telefónica a los más mayores. Además, jugadores y empleados del Málaga se rascaron el bolsillo para colaborar con el Atlético Torcal para adquirir o fabricar distintos materiales sanitarios y realizaron donaciones a varios hospitales.
No sólo desde dentro del Málaga se realizan actos que tienen que ver con la solidaridad, también los aficionados e incluso los exjugadores demuestran que todos podemos aportar nuestro granito de arena. Uno de los grupos que más se han movido en este tiempo ha sido el Frente Bokerón, al que incluso acompañó el exmalaguista Samu García en una de sus recientes visitas a los hospitales costasoleños, a los que llevaron alimentos y bebidas. Malaka Hinchas y otros colectivos blanquiazules también ha realizado iniciativas en esa sintonía.