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Dani García: "Un chef es como un mediocentro, manejando el cotarro"

Cuando los fogones se apagan, la cocina sigue funcionando en la cabeza de todo gran cocinero. Es el caso de Dani García, el prestigioso chef malagueño que tiene en su currículum tres estrellas Michelín y que es una superestrella de la cocina. El marbellí ha charlado con ElDesmarque Málaga para explicar cómo está llevando el confinamiento, cómo sus planes para lo que prometía ser un espectacular 2020 han sufrido un pequeño receso, pero también para hablar de fútbol y de cómo ha recobrado la pasión por el deporte de la pelota (ver vídeo superior).

Dani García nos atiende desde su casa en Marbella. El trajín de su vida, llena de viajes, eventos y el estrés de la cocina, se ha visto ahora parado de golpe desde el estado de alarma. Tiene la suerte de contar en casa con sus dos hijas. Y disfruta también con ello: "Me encontrado con una situación extraña pero también bastante confortable. Es un regalo poder estar con mis dos hijas".

Pero entre platos de alta cocina y viajes exóticos también hay tiempo para el fútbol. "Me gusta el fútbol. Me gustaba más de pequeño porque estaba más atento", dice, a la vez que asegura que desde que cerró su restaurante tres estrellas Michelín, tiene más tiempo para disfrutarlo: "Este último año, dejando el restaurante de la alta cocina y volviendo a estar en casa los sábado, he recobrado la pasión... hasta que ha llegado el Covid-19".

El chef malagueño Dani García.

Sorprende que para él, el fútbol y la cocina no son tan dispares. Y Dani García hace una curiosa semejanza: "Un chef es más como un mediocentro, manejando el cotarro". Además, centra el foco sobre un futbolista que ha sido, posiblemente, uno de los mejores en ese puesto en los últimos años. "Creo que sería Xavi Hernández, el del Barça, es por donde pasa todo y donde lleva la batuta en el campo. Y el jefe de cocina podría ser eso también, más que un entrenador porque vas probando cosas y vas para un lado y a otro", admite el malagueño, que también es un poco culé.

El chef, pese a tener tres estrellas Michelín, tiene que cocinar cada día y ha aprovechado la coyuntura del confinamiento para subir sus andanzas en la cocina de casa a sus redes personales y, de paso, convertirse en todo un influencer. Dani se encarga de mostrar al mundo entero y a sus miles de seguidores en las redes sociales cómo la cocina puede llegar a todos sitios. "Percibo que la gente necesita cosas sencillas. Lo que hago en casa pero dándole ese toque profesional que yo le doy", comenta, a la vez que resalta el cariño que percibe: "Al final lo tengo que hacer sí o sí por la gente".

El 2020, un año complicado

Para Dani García también está siendo una situación atípica. El chef, que tiene abiertos restaurantes por medio mundo o que estaban en proceso de ello, considera que la situación "no es tan grave como la crisis de 2008", pero que pronto vendrá "una segunda parte, como un partido de fútbol". "Cuando abramos, es lo complicado de verdad. Gastos otra vez, a lo bestia, y no sabes cómo va a tomar la gente o el Gobierno las imposiciones. En esa segunda parte habrá que ver la estrategia según vayan pasando los días. Y ver lo que vas a facturar, que posiblemente no sea más de un 50 por ciento de lo que hacías anteriormente", advierte.

"Somos latinos y conceptualmente somos más perdedores que ganadores. Veo más pesimismo aquí que fuera de España"

Y espera que 2020 siga siendo el mejor año de su vida: "Íbamos a abrir en Catar, en Doha se abrió. En Arabia, Miami, Nueva York, Bahamas, París, Amsterdam, Marbella con Leña, Four Season Madrid… Era probablemente el mejor año de mi vida", rememora de cuando se asomaba a este curso a finales de 2019. Y lanza un mensaje para navegantes. "Tengo buenas sensaciones fuera. Nuestros socios están más motivados que en España. Somos latinos y conceptualmente somos más perdedores que ganadores. Veo más pesimismo aquí que fuera", lamenta Dani García, un chef tres estrellas Michelín que también es futbolero.

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