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Baha: "Sabía que Antonio Hidalgo iba a ser entrenador desde que lo conocí"

Baha, en sus etapas como jugador del Málaga y del Sabadell.

Formaron una pareja inolvidable en el malaguismo: Baha y Antonio Hidalgo dieron con sus goles uno de los ascensos más felices que se recuerdan. Tras abandonar Martiricos, sus carreras se unieron de nuevo en Sabadell, donde Hidalgo dirige ahora la nave desde el banquillo de la Nova Creu Alta que el Málaga visita este domingo casi 30 años después. Allí se tropezará con uno de los ídolos blanquiazules modernos, y bien orgulloso que estará de ello Baha, que seguirá el partido desde Rabat. Era una buena excusa para hablar con el marroquí, que analiza el encuentro y la actualidad del Málaga para ElDesmarque, y que deja varias reflexiones muy interesantes en forma de nombres propios.

- ¿Cómo lo lleva, qué anda haciendo?

Estoy bien, en Marruecos todavía. Sigo trabajando en el mismo club, el FUS Rabat. Ayer renové mi contrato por tres años más. Me estoy sacando los diplomas de entrenador con la Federación Marroquí de Fútbol. Aquí soy segundo entrenador. Acabamos la liga hace tres semanas en cuarta posición, que nos da la posibilidad de competir en la CAF (la Europa League en Europa) y ahora estamos en plena preparación para la siguiente temporada, que empezará a final de mes. Los plazos han cambiado con el coronavirus.

- Partido interesante para usted este domingo: Sabadell-Málaga.

Sí, son dos equipos en los que he jugado y encima con un entrenador con quién he jugado, Antonio (Hidalgo). Así que lo seguiré para ver cómo se está portando Antonio.

- Coincidieron en el Málaga y en el Sabadell, ¿cómo lo ve en su nueva faceta de técnico?

Desde que conocí a Antonio en Málaga ya sabía que después del fútbol sería entrenador porque le gustaba mucho hablar de técnica, de táctica, de cómo leía los partidos... Y en el campo, tácticamente, era un jugador que manejaba muy bien los sistemas. Cuando jugamos juntos en el Sabadell ya tenía más edad y lo veías incluso más interesado en ser entrenador.

Baha, junto a Hidalgo en un balón parado en el Sabadell.

- ¿Qué recuerdos tiene de sus dos años en el Sabadell?

A nivel futbolístico no fueron como hubiera querido, porque mi primer año me acuerdo que volví de Atenas después de dos meses sin competir y que había empezado la pretemporada tarde con el Sabadell. Llegué un poco fuera de forma. No tuve la misma preparación que los demás y me costó mucho durante la temporada. El segundo año, el entrenador Luís Carreras no me hizo jugar. La gente siempre se portó muy bien conmigo: presidente, dirigentes, afición… Pero el entrenador se equivocó mucho teniendo a un jugador como yo y no darme minutos sabiendo que íbamos a luchar por no bajar y con delanteros que no marcaban. No estaba ni en el banquillo, estaba en casa porque no me convocaba. El primer año sí tuve responsabilidad, pero el segundo sí estaba en buena forma. En pretemporada marqué muchos goles, y estaba bien de peso y de la cabeza y todo. Fue una pena.

- Allí se reencontró con Hidalgo, su pareja letal en el ascenso del Málaga a Primera.

Fueron años espectaculares, y cuando estás retirado del fútbol y empiezas a analizar las temporadas ves que siempre sale, además de algunas en Portugal, la temporada que pude vivir en Málaga. La verdad es que lo que hicimos en Málaga fue espectacular, y se echa de menos ver a la gente que compartimos aquel vestuario. No tenemos un grupo de Whatsapp, pero sí hablo mucho con varios: Sandro, Antonio Hidalgo, Paulo Jorge, Hélder, Carpintero, Calleja... ¡Han salido muchos entrenadores de ahí!

Los jugadores del Málaga celebran uno de los goles ante el Tenerife en La Rosaleda.

- ¿Cómo ve al Málaga?

Lo bueno es que ha empezado bien teniendo dificultades para fichar a jugadores. Ahora con menos dinero es difícil fichar a coste bajo. Es complicado, pero Manolo ha hecho un buen trabajo, ha encontrado soluciones para que se vayan futbolistas e incorporar a otros de calidad. Será un año complicado porque ya conocemos la categoría.

- ¿Le recuerda en algo a su primer año en Málaga?

Le mentiría si digo que sí, porque no conozco a nadie de los que han venido, muchos vienen de fuera. No sé cómo están dentro del vestuario, porque estoy lejos y no tengo información, pero deseo al club que esté donde se merece. Haya o no buena gente, el Málaga tiene que estar arriba.

- Con Manolo también coincidió de corto dos años en Primera.

Le gustaba hablar de fútbol, pero era más de cachondeo, con un carácter más bromista que Antonio Hidalgo. Nunca pensé que llegaría a ser director deportivo, pero sé que a su Málaga lo quiere mucho, porque es un tío de Málaga, formado en la cantera del Málaga, que jugó en el primer equipo, que se fue y que volvió. Cualquier niño que nace en una ciudad y que le guste el fútbol lo que quiere es triunfar en el equipo de su ciudad. Y si después encima puedes volver a trabajar en el club que te lo ha dado todo…

- ¿A usted le gustaría?

A mí me encantaría. Ni yo ni mis hijos somos malagueños, pero desde el primer día que vine es una ciudad que siempre tengo en el corazón. Si vuelvo a vivir en Málaga seguro que trabajaré en el club.

Baha y Benachour, rezando junto a Forestieri.

- Le pregunto por Ben Barek, alguien a quien considera de su familia.

Con el coronavirus no ha venido mucho a Marruecos, pero hablo con él. Lo llamo para ver cómo está. Tiene una edad y me preocupo por ver cómo está de salud. Todos lo conocen, es una persona formidable, con un gran corazón y malaguista. Desde aquí le mando muchos abrazos.

"A veces creo que Boulahroud se ha tenido que respetar un poco más. Una persona que no juega no puede quedarse callado y esperar. Hay que tener carácter. Eso es fútbol, no hay sitio para los débiles"

- ¿Qué pudo fallar con Boulahroud?

Lo que pudo fallar no lo sé, tener la continuidad que podía merecer, a lo mejor los entrenadores. Él habrá tenido también parte de culpa cuando tres entrenadores no te han hecho jugar. Algo ha podido fallar con el jugador. A veces algunos funcionan en un equipo, otros en otro. Tiene calidad y es una persona formidable que siempre ha sido profesional, que no ha dicho nada. Yo hubiera dicho varias cosas, y a veces creo que se ha tenido que respetar un poco más. Una persona que no juega no puede quedarse callado y esperar. Hay que tener carácter y hacerse respetar. Eso es fútbol, no hay sitio para los débiles.

- ¿Le ve futuro a Hicham?

Deben respetarle las lesiones porque es un jugador con mucha velocidad y con las fibras rápidas que tiene muchas veces se lesiona. Yo creo que este jugador tiene mucha calidad, le tienen que dar continuidad. Por ejemplo, el año que estaba Muñiz tenía que haber jugado más porque cuando entraba los últimos 20 minutos hacía la diferencia, ganaba faltas, penaltis… Y porque no había jugadores de esas características, rápidos, que desbordan y que son importantes. Se ha adaptado a España, seguramente hablará español, tiene más edad y este año tiene que ser su año. Decir yo soy hijo del club, porque he llegado muy joven. Tiene que dar ya el salto y quedarse en el Málaga o ir a otro club de otra categoría.

"Este debe ser el año de Hicham, debe decir yo soy hijo del club. Se ha adaptado a España, seguramente hablará español y tiene más edad. Tiene que dar el salto ya"

- Bueno, acabemos con un pronóstico para el domingo.

0-2. Siempre el Málaga, ¡siempre!

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