En el fútbol de hoy en día, donde todo puede cuantificarse como si fuera otro deporte con más valores estadísticos, la distancia recorrida en kilómetros es uno de los baremos más apreciados por técnicos e hinchada. Como ocurre con la posesión, tener indicadores más elevados no convalida en mejores resultados, pero sí supone un valor añadido para edificar triunfos. Correr más no significa ganar más. Pero ayuda, porque también es una evidencia del nivel físico del equipo en cuestión. El Málaga CF, ya se viene comentando durante toda la temporada, suele irse a la caseta sin dejar nada en el campo, pero ahora los datos demuestran que efectivamente el cuadro blanquiazul, al margen de individualidades, es uno de los equipos que más corre en la categoría, concretamente el tercero tras el RCD Espanyol, uno de los gallitos, y el Mirandés.
Normalmente, estos datos cuantitativos los hacía público LaLiga, pero ahora se ciñen al ámbito profesional. Los jugadores portan un GPS tanto en entrenamientos como partidos, y los técnicos los escrutan diariamente para medir y optimizar el rendimiento personalizado y adecuar las cargas a las fatigas acumuladas para la prevención de problemas musculares. Así, As ha publicado estos días las medias de los kilómetros recorridos por los diferentes equipos de LaLiga SmartBank hasta la jornada 29. Y los datos del conjunto de Sergio Pellicer no sorprenden. Su estilo de juego con presión en bloque alto, con repliegues, y su ADN físico favorecen que sólo dos conjuntos corran más. Cuando se gana se podrá decir que se corre con sentido; cuando no, al revés. Al final, ciertamente, y en categorías donde no sobra la calidad diferencial, el fútbol se mide en las áreas, en la eficacia y en cometer los menos errores posibles.
El Málaga corre por partido 111,03 kilómetros. Esto supone, redondeando, una media de 10 kilómetros por futbolista si no computamos los cambios. El registro se sitúa muy por encima del promedio de la competición: 107,66 kilómetros. Lidera la tabla el Espanyol con 111,4 kms, mientras que el Mirandés hace de media por partido 111,17. Por la parte baja de la tabla aparecen el Lugo (105,6), el Albacete (104,8), el Rayo (104,4) y el Fuenlabrada (102,4). En este sentido manejar la posesión puede ser un motivo para correr menos. Pero los factores son de diversa lectura. El caso es que el Málaga ocupa la tercera plaza de esta tabla, y no es ni mucho menos baladí.