El Málaga CF regresó a los entrenamientos este martes y lo hizo con dos buenas noticias en cuanto a nombres propios. La primera la puso Luis Muñoz, ausente desde que se lesionó en Lugo en los isquiotibiales de la pierna izquierda y que en la vuelta al trabajo se reintegró de forma parcial con el grupo. Avanza favorablemente el canterano, autor de cinco goles esta temporada y cuya evolución invita a pensar que pueda estar disponible para Sergio Pellicer de cara al choque de este sábado ante el Fuenlabrada. Además, Calero continuó dando pasos firmes en su recuperación de rodilla y ya hace parte del trabajo individual sobre el césped. Las sensaciones son buenas y poco a poco comienza a ver la luz. Tocar el verde ya es una gran señal.
Cabe recordar que Calero fue operado en enero y que nunca ha querido ponerse plazos para un posible retorno. Ahora, pone una piedra más en las distinta fases de una recuperación siempre larga y a la que aún le restan varias etapas más. Además, hay que destacar que tanto Escassi como Josua Mejías e Ismael Casas trabajaron a medias entre el gimnasio y el césped, los tres de forma individual y tratando de acortar plazos para volver pronto con el grupo. En el gimnasio también estuvo Hicham y, además de Calero, el otro lesionado de gravedad: Pablo Chavarría.
El entrenamiento se desarrolló en el Anexo y sirvió como primera avanzadilla para preparar el choque ante el Fuenlabrada, al que el Málaga CF llegará con la misma desventaja de siete puntos con respecto a los puestos de play off. Como es habitual, mucha presencia de jugadores canteranos. Hasta 10, concretamente: Gonzalo, Ale Benítez, Murillo, Andrés, Cristo, Ramón, Quintana, Mini y el cumpleañero Larrubia (19 años). Mañana miércoles, por tanto, segunda sesión de la semana con la mirada puesta en una enfermería que aún tiene ocupantes que Pellicer mima para recuperar cuanto antes.