Fue el gran ausente en la primera vuelta por problemas físicos y será el gran atractivo en el Espanyol-Málaga de la segunda mitad del campeonato. Keidi Bare se enfrentará por primera vez al conjunto blanquiazul, con el que hizo parte de la pretemporada y que lo traspasó al club perico el pasado verano. No, no es un partido más para el albanés, que llegó en 2018 para el filial y que compitió dos temporadas a buen nivel en Martiricos. “Estaba esperando mucho este día para jugar contra ellos”, señaló Keidi en rueda de prensa este miércoles.
“Al Málaga siempre le tengo mucho cariño, es como mi segunda casa. Ahí he hecho mucho amigos y de verdad que se han portado muy bien conmigo. Tanto el club como los aficionados”, siguió Keidi, que se congratula por el giro de guión que se ha dado en el seno del club blanquiazul. Nada que ver con sus últimos días en Alhaurín: “He hablado con algunos compañeros y al principio se veía difícil, pero veo que las cosas ya están saliendo muy bien y estoy muy contento por ellos. Espero que mejoren y sigan así”.
Tras sus problemas para ser inscrito, convocatorias con Albania y lesiones, Keidi se ha asentado por méritos propios en el equipo espanyolista. 25 partidos oficiales y titular en las últimas cuatro citas. “Con el trabajo todo se consigue. He trabajado mucho para llegar hasta aquí, los compañeros me han ayudado un montón y el cuerpo técnico me ha dado la confianza. Estoy muy bien, al cien por cien y espero seguir así hasta el final de temporada”, explicó Keidi.
“Tenemos un partido muy importante el domingo. Aún no hemos hecho nada y hay aún trabajo que hacer con humildad. Todo el mundo queremos subir cuanto antes, el domingo vamos a por todas para ganar el partido y estar más cerca. Presión no porque cada partido vamos al máximo nivel para hacer las cosas bien”, finalizó Keidi al respecto de las opciones de ascenso matemático que tiene ya su equipo este domingo.