La revolución inerte de Natxo González en el Málaga: más de 20 jugadores en cuatro partidos

La llegada de Natxo González al banquillo del Málaga CF estaba llamada a ser una revolución necesaria para paliar la mala racha del equipo sobre el césped. Tras sumar sólo cinco puntos en seis jornadas, se buscaba que la destitución de José Alberto López y el toque del nuevo técnico obraran el milagro de cambiar el chip. El vasco ha intentado cambiar muchas cosas, desde el estilo de juego hasta el protagonismo de los componentes del vestuario, pero todo ha sido prácticamente en vano. Ha usado a más de 20 jugadores diferentes en cuatro partidos y los números siguen sin cuadrar.

Ya en su primer choque al frente del equipo, ante el Mirandés, Natxo introdujo un cambio significativo: dio entrada a Dani Barrio en la portería, en detrimento de un Dani Martín que era el elegido siempre por José Alberto. Además, metió a Escassi como central acompañando a Juande, con un resultado bastante decepcionante -el encuentro acabó con un 3-0 en contra-. También optó por dejar a Brandon en la punta de ataque, algo que tampoco salió bien. En Anduva agotó los cinco cambios, pudiendo ver así a 16 de sus jugadores.

En el siguiente encuentro, la visita a La Romareda, el técnico de Vitoria volvió a hacer cambios en la alineación inicial. Con Juande lesionado, la dupla de centrales la formaron Peybernes y Lombán, mientras que Cufré ocupó de inicio el lateral izquierdo. También recuperaba a Paulino, por lo que decidió darle un hueco en el once y asimismo meter a Roberto como referencia ofensiva. La prioridad, lo dejaba claro Natxo, era mejorar la defensa y ante el Zaragoza se vieron brotes verdes en este sentido. Se frenó la sangría goleadora, pero disminuyó en exceso el nivel en la faceta ofensiva. Ya eran 19 los efectivos usados por el míster del Málaga.

Los cambios que no cuajan para Natxo González

Ante el Almería apenas hubo modificaciones, más allá del regreso de Javi Jiménez a la titularidad en el carril zurdo. Fue un choque complicado, en el que Natxo intentó jugar con toda su artillería tras recibir el gol de Umar Sadiq, aunque de poco sirvieron los cambios, mayoritariamente ofensivos.

Todas las esperanzas de vislumbrar la verdadera revolución, después de tres partidos y con la necesidad imperiosa de ganar los tres puntos, estaban puestas en el choque ante la Real Sociedad B. Entonces Natxo se vio obligado a meter a Ismael Casas como central acompañante de Lombán, ante la ausencia por sanción de Peybernes. El resto del once se mantuvo, pero los dos goles en contra antes del minuto 55 le llevaron a hacer de nuevo cambios para buscar un empuje en ataque.

Fueron los primeros minutos de Vadillo a las órdenes de Natxo y también los de Chavarría, recién recuperado de su última lesión. Pero anímicamente el equipo estaba destruido por el resultado en contra y de poco sirvió la idea de buscar balones arriba.

En total, 22 jugadores diferentes ha probado ya Natxo González. Ha agotado los cinco cambios en dos ocasiones, en las derrotas ante Mirandés y Real B. Pero su revolución queda inerte. Los resultados no mejoran y el Málaga se pasea de puntillas por el filo del abismo de LaLiga SmartBank. ¿Habrá otra revolución ante el Cartagena el próximo lunes?