Ramón, entre algodones

Con la cabeza ya plantada en el importante choque del próximo sábado ante el Burgos, en el que puede certificar la permanencia en LaLiga SmartBank de forma matemática, el Málaga CF se ha ejercitado este miércoles en el césped de La Rosaleda. Pablo Guede dispuso de casi toda la plantilla disponible, aunque Ramón Enríquez trabajó de forma parcial. El de Órgiva está entre algodones para llegar al cien por cien al encuentro frente a los burgaleses.

Sin novedades en el capítulo de lesionados, Javi Jiménez, Juande Rivas, Adrián López, Jozabed Sánchez e Hicham Boussefiane han continuado recuperándose de sus respectivas molestias con trabajo específico. En cuanto a Ramón, especifica el club que ha trabajado de forma parcial y progresiva.

Para completar la sesión, el técnico argentino ha contado con jugadores sin ficha del primer equipo como los guardametas Dani Strindholm y Carlos López o los habituales Ismael Gutiérrez, Kevin Medina, Roberto Fernández, Andrés Caro, Loren Zúñiga, Alberto Quintana, Víctor Olmo y Dani Lorenzo.

El ambiente entre la plantilla es de alegría y satisfacción tras la victoria del pasado sábado ante el Tenerife, aunque centrados cómo no en el partido con el que pueden dar por cerrada la salvación de la categoría. Reseñó Guede tras el choque en el Heliodoro Rodríguez López que no se puede festejar hasta que no esté todo el trabajo hecho y es que hay varios escenarios en los que el Málaga todavía podría caer en el descenso a Primera RFEF.

Las altas temperaturas también han sido protagonistas en la sesión, que ha comenzado sobre las 10:30 horas después del paso de los jugadores por el gimnasio. El jueves, nuevo entrenamiento a las 10:00 horas en las instalaciones del estadio de Martiricos.