Manolo Gaspar reconoce que quería irse en octubre y su peor decisión: "Me he quemado"

Arropado por todos los trabajadores, jugadores y cuerpo técnico del Málaga CF (como puede verse en el vídeo superior), Manolo Gaspar dio su última comparecencia ante los medios de comunicación en su dimisión como director deportivo del club blanquiazul. Más allá de leer una carta de despedida, respondió a las pertinentes cuestiones que se le realizaron y reconoció sus errores, que sabía que quería salir desde hace más de tres meses y cuál ha sido la peor decisión que ha tomado ahora a toro pasado.

¿En qué momento se da cuenta Manolo Gaspar de que debe salir?: "Cuando sale Guede. Lo tenía clarísimo, pero había que encontrar el momento. Lo hablé con José María (Muñoz) como dos profesionales, buscando lo que creemos que es lo mejor para el club. Cuando sale Pablo, mi decisión estaba tomada aunque el equipo hubiera conseguido el ascenso".

Tiene esto una trascendencia que quizá no es normal, ¿ha cargado Manolo con responsabilidades que salían de sus funciones?: "Sí, pero a los malagueños nos pasa eso a menudo. Cuando son momentos de crisis, la imagen y la voz de esa institución, se quema mucho. Estamos en esta situación por los resultados deportivos, que son mi responsabilidad y asumo. Pero me he quemado mucho. He sido la voz, la imagen, el que manda el mensaje, el que ficha y eso quema. Estaba todo centrado en mi persona. Y por eso creo que lo mejor, que va a mejorar el ambiente, es que no esté en el foco. Cansa mucho estar en tu tierra, con todo lo que eso supone, con el cariño al club, en una situación que solo unos pocos sabemos. Solo nosotros sabemos lo que hemos pasado aquí. Hemos visto renacer de nuevo al club, es literal. Mi imagen al final de la temporada pasada estaba bastante quemada, se recupera con este mercado, pero esas expectativas son las mismas que luego pesan sobre mí. Es el fútbol. Hay que asumirlo".

¿Se planteó la salida de su puesto tras la pasada temporada?: "No, en ese momento tenía ganas de pelear, porque estuve con un entrenador que me transmitió una fuerza y una seguridad que me hizo soñar. Hicimos una planificación, la más trabajada sin duda de las que he podido ver. Pensada al detalle, pero volvemos a lo mismo. Es fútbol y no se puede controlar. En el fútbol, cuanto más trabajas, a lo mejor no hay resultados".

No todos los errores son suyos. ¿Qué errores cree que ha tenido?: "Cuando tienes que hacer una plantilla cada año, lo normal es que te equivoques. Esa es la situación que teníamos. No íbamos con fuerza y no podíamos acceder a jugadores para hacerles dos o tres años de contrato. El año que viene, en Segunda, vamos a tener una base poderosa de jugadores y será más fácil. Errores, muchos y estáis vosotros para decirlos. Los que son míos, lo son y de nadie más. En el momento habría tomado las mismas decisiones. Se valora lo mejor para el equipo y se toma una decisión y cuando las tomas, te equivocas. Ningún error ha sido a conciencia".

¿Por qué en el momento en que sabe que quiere irse no se va?: "Porque me reúno con el club y me piden que continúe por favor, que confían en mi trabajo, que haga el mercado porque sabíamos las condiciones que teníamos. Yo no se lo digo en ese momento al club, se lo digo cuando creo que es el momento de cara al mercado, que ponga otra cara aquí y ponga otro mensaje y la gente se lo crea. Porque el fútbol es ilusión y la gente quiere soñar. Y yo desde el primer día he contado la verdad y eso quema. Hay que trazar unas líneas de trabajo diferentes e ir con ellas a muerte".

¿No era mejor haberse ido en ese momento?: "Si hubiese ganado el equipo, no pasa todo esto. Que me pinten, que me canten, que me amenacen, que amenacen a mis hijos, lo llevo con deportividad. Sé que quien me conozca un poco solo, sabe que es mentira. Estamos en una sociedad en la que difamar tiene más credibilidad que lo que dice la persona y hay que andar demostrando cosas. Una mentira contada 100 veces es una verdad. Eso es basura. Lo que digan de mí, entiendo las cosas de la afición, pero tenía que poner el pecho a las balas y se me pidió así. Y hasta hoy".

Se ha quitado un peso de encima, ¿le compensaba?: "No compensa, pero soy leal".

¿Un mensaje a la plantilla, que es quien tiene que sacar al equipo?: "Ya se lo he dicho, lo que pensaba y sigo pensando que es una gran plantilla, pero a veces esto es fútbol. No sé qué decirte. Nos sentimos todos muy orgullosos, ellos lo están dando todo. Lo que he hablado, queda entre nosotros".

¿Alguna decisión que ahora se haya dado cuenta Manolo Gaspar de que ha fallado?: "Echar a José Alberto. La peor decisión posible".

Entiende que todas las cosas que han pasado alrededor del club, que no son del todo ciertas, ¿afecta a la credibilidad del club?: "Lo de la credibilidad, todo no se puede decir. Hay cosas internas del club que no se pueden contar y hay que entrar por otro lado, pero, ¿engañar? Nunca".

¿Cree que José María debería estar con él en el pupitre? ¿Se siente cabeza de turco?: "No, para nada. José María está ahí porque siempre está ahí. Si le pido que esté aquí, lo está".

¿Qué tiene que sanar para que vuelva a La Rosaleda?: "Todo. El final. No tengo ganas de venir, la verdad. Voy a seguir al Málaga, porque es mi vida. Llevo 7 años sin ir a comer a mi casa. Hasta que mi hijo no me pida venir, lo voy a ver por la tele. Me duelen las formas de despedirme, sé que no me las merezco".

¿Cree que este Málaga se va a salvar?: "100%, no tengo ningún tipo de dudas. Si hay algún equipo que tiene todo para salir de ahí, es el Málaga, estoy convencidísimo. Estamos en las mejores manos posibles, no puede pasar otra cosa".