El domingo regresa el fútbol a La Rosaleda, que espera vivir uno de esos días que marcan, para bien o para mal, lo que pueda venir más adelante. Ganar sería lograr la segunda victoria consecutiva que nunca llega, e insuflaría un poco más de fe a la grada malaguista, que se llenará de gente que coloreará un gran mosaico blanquiazul.
El Málaga-Cartagena es uno de los últimos cuatro duelos que quedan por jugarse en territorio malacitano. Para seguir en pie en la lucha por salir del descenso y meter presión a los rivales directos, Sergio Pellicer no podrá contar con Lago Junior, lesionado del aductor, aunque no sea nada grave. El costamarfileño ha sido un titular indiscutible hasta Villarreal, cuando salió desde el banquillo y duró sano 15 segundos.
Por posición, por cualidades que aporta y por la confianza en él que tiene el técnico castellonense, el que se postula como pieza fiable de recambio es Álex Calvo. El canterano malaguista volvió a gozar de minutos en La Cerámica, aunque en un contexto de replegarse atrás y luchar por los balones en largo arriba.
Jugó media hora en la que estuvo cerca de hacerle el lío a la defensa por su fe en el salto a un balón divido -que ganó hasta en dos ocasiones- para casi asistir a Rubén Castro. Su chispa y valentía, unida al pundonor que pone en cada jugada, es lo que convence a Pellicer para que el chaval esté por delante de Arvin Appiah, desaparecido de la rotación.
Desde su golazo en Gran Canaria, Álex Calvo ha sido la primera opción como revulsivo para Pellicer, que no pudo contar con él para el último partido en casa contra el Leganés por estar con España sub-19. Su participación ha sido gradualmente mayor, pasando de los seis minutos que jugó contra Las Palmas y Levantes a los 14 en Andorra y la media hora contra el Villarreal 'B'.
Ahora, el cordobés de 19 años puede tener la oportunidad de gozar con más minutos de importancia o incluso de salir como titular por primera vez, aunque la puesta en escena del equipo en la primera parte llama a pensar que Pellicer saldrá co enl mismo once que en Villarreal. Repetiría con el 3-5-2 con Ramón-Febas-Villalba y la dupla de delanteros de la que depende el Málaga, si hablamos de números.
Ha tenido ratitos de fútbol en los últimos cuatro partidos que fue convocado y ahora, sin Lago Junior (al que normalmente sustituía), tiene vía libre para desplegar su talento. El malaguismo quiere ver más de Calvo y Pellicer, siempre cauto en la gestión con los jóvenes, deberá decidir si conviene meterlo desde el inicio, buscando revolución o como solución de emergencia.