Los fichajes del Málaga en la posición de lateral izquierdo, primero con el experimentado Víctor García y más tarde con el regreso del excanterano Dani Sánchez, han desembocado en la desvinculación de Víctor Olmo, que no iba a tener minutos suficientes en Primera RFEF para que progrese en lugar de estancarse.
El futbolista jerezano de 22 años tenía contrato hasta 2024, pero tanto club como jugador han acordado una rescisión del contrato para quedar libre y buscar un destino que ya ha encontrado. Víctor Olmo, como avanzó Sur, jugará en la Balompédica Linense, club de la Línea de la Concepción (Cádiz) que juega en Segunda RFEF.
Sufrió en octubre de 2022 una lesión de rodillo que lo dejó en el dique seco después de haber jugado seis partidos en Segunda con el Málaga. Aquella rotura del ligamento cruzado anterior que sufrió durante un partido que enfrentaba al filial malacitano con el Torreperogil en La Rosaleda truncó su progresión. Era muy del gusto del exentrenador Pablo Guede, que lo apodó Pepino por su velocidad y proyección.
La marcha del Víctor Olmo era necesaria para el jugador, según analizó Sergio Pellicer tras el último triangular de amistosos disputado en Antequera. "Es un chaval que ha tenido una actitud encomiable. Viene de una lesión grave, yo desgraciadamente padecí eso como jugador, sé lo que es eso y necesita jugar. Entrenando, su actitud es un ejemplo para muchos con la lesión que tuvo".
Halagó su trabajo esta pretemporada, pero no entraba en los planes de la dirección deportiva ni del cuerpo técnico. "No se perdió un entrenamiento, con actitud positiva y empujando. Pero pensamos que no era un jugador para muchos partidos, en rendimiento sobre todo. Lo mejor para Víctor es que juegue partidos porque si no es un paso atrás. Hay veces que un jugador está varios años y compiten pocos y este año no debe pasar eso con Víctor y con algún jugador más", dijo Pellicer, que tiene a Víctor García y Dani Sánchez como opciones para su demarcación.