Tras el anuncio de la FIFA el pasado miércoles, España ya sabe que será parte importante en el desarrollo del próximo Mundial de 2030. La gran cita futbolística por excelencia se disputará, en gran medida, en estadios nacionales. No en su totalidad, pues los partidos inaugurales se jugarán en Uruguay, Argentina y Paraguay.
La oficialidad ha dado pie al sprint final para alcanzar la gloria de convertirse en sede mundialista. La Rosaleda es uno de los estadios que siguen vivos en esta pelea. El templo del Málaga CF experimentaría una gran ampliación y renovación de conseguir tan cotizado premio.
El estadio costasoleño entra en la gran mayoría de las quinielas por varias razones de peso. La gran mejora que experimentarían los exteriores de La Rosaleda, según se presentó en el proyecto de renovación, cumpliría con los requisitos demandados.
Respecto al aforo demandado por la FIFA, el proyecto de remodelación recoge un incremento de espectadores netos llegando hasta los 40 mil y pudiéndose ampliar hasta los 45 mil.
La inversión de este ambicioso proyecto oscilará entre los 70 y 120 millones de euros. Más allá de la disputa del Mundial 2030, el objetivo es potenciar la actividad económica y comercial de La Rosaleda durante los 365 días del año.
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