En los minutos previos al inicio del Málaga - Córdoba, la afición local ha protagonizado un emotivo momento. La hinchada boquerona nunca deja solo a los suyos y este domingo lo ha vuelto a demostrar.
Mientras los jugadores esperaban al pitido inicial, la afición del Málaga cantó el himno a capela para llevar en volandas a sus futbolistas. Sin música, solo las miles de gargantas que abarrotaban la Rosaleda, se unieron para cantar el himno a pleno pulmón y dotar a sus futbolistas de un plus de fuerzas para encarar el partido ante el Córdoba en busca de los tres puntos.
Cuando los jugadores saltaron al campo, había un tremendo ambientazo. Hasta el pitido inicial la afición local no paró de cantar y animar a su equipo. Misma actitud que los cientos de aficionados del Córdoba que ocuparon la grada visitante y que tampoco pararon en ningún momento de animar a su equipo.
Ya en la previa del partido - y como siempre hacen - los aficionados del Málaga no defraudaron. Desde bien temprano estuvieron en los aledaños del estadio para recibir a los jugadores, que llegaron en sus coches particulares a la Rosaleda. Cientos de aficionados cordobeses arroparon también a los suyos debido a la cercanía entre ambas ciudades.