El quinto y penúltimo fichaje del Málaga para la 2024/25 es un mochilero del fútbol. Hace nueve años trabajó durante seis meses como carpintero en Australia y ahora es delantero de un club histórico en el año del récord de abonados. Sergio Castel (1995, La Rozas, Madrid) es un futbolista peculiar por todo lo que ha vivido en su carrera. Puede decir que se retiró con 20 años, cansado de entrenadores que no le ponían, y volvió tiempo después a las canchas para vivir un largo viaje que tiene parada en la Costa del Sol.
En La Rosaleda atiende a ElDesmarque en su primera entrevista como malaguista. Desea romper sus registros goleadores. Su compañero Dioni Villalba lo saludo al término de la charla y comenta que Castel es lo más parecido a Roberto que hay en plantilla porque "es muy rápido al espacio". Castel le dice a Dioni "tiburón blanco" entre risas. El buen rollo se palpa.
- ¿Qué tal estos primeros días en Málaga?
Muy bien, muy contento. Como ciudad no la conocía bien y me está
sorprendiendo mucho todo. Y luego, como club, una pasada. Tiene una infraestructura de Primera División y estoy muy contento con los compañeros.
- Es importante un buen ambiente de vestuario. Aquí parece que lo hay.
Sí, sí, ya me han adaptado totalmente al grupo. Soy además uno más y a mí me gusta hacer bromas y estar constantemente enchufando a la gente. Como dices tú, yo creo que es más que fundamental, es que es crucial. Más en Segunda, que todos los partidos son tan competitivos y va a haber momentos malos donde juegues mejor que el rival y pierdas y vuelvas a perder... ahí es donde se ve un grupo unido. Igual que ahora estamos en una buena racha, que hay que saber aprovecharla y disfrutarla, van a venir rachas malas.
- Ya ha debutado en La Rosaleda. Se le vio cansado tras varios meses sin competir. ¿Cómo lo vivió?
Físicamente me falta mucho. Ahora mismo diría que estoy a mi 50 por ciento de capacidad, tranquilamente. Venía de tres meses y medio sin competir, desde el 12 de mayo que terminé la Liga en Chipre. Encima allí estuvimos desde enero con impagos. En los últimos dos meses prácticamente no entrenábamos, íbamos solamente a competir a los partidos. Entonces estás sin ritmo de entrenamiento. Llegas aquí, estás una semana y media de adaptación, lo echas todo, salgo al campo y la verdad es que me asfixié, me noté muy cansado. Pero poco a poco, estamos en ello.
- ¿Dónde estaba cuando le llama el Málaga? Cómo fueron las conversaciones para su fichaje.
Estaba en Alicante de vacaciones con la familia y me llamaron Loren y el míster.
Me explicaron un poco todo. Al Málaga todo el mundo lo conoce ya, esto es un transatlántico en Segunda. Me convencieron con lo que me dijeron, fueron muy sinceros y yo también, porque ellos sabían que yo tenía ofertas económicamente muy superiores en el extranjero.
- ¿Qué le convenció para volver a España?
El club que es, la ciudad que es y el proyecto me llamó enseguida. Me medio enamoré, por así decirlo, y dije: voy a volver y voy a intentar reventarla este año.
- Firma por una temporada solo. ¿Decisión mutua?
Decidimos las dos partes que era lo mejor, yo también les dije que era lo mejor y luego, si estamos contentos, ya hablaremos. Pero es una temporada a full y ya está. ¿Por qué? Es algo más personal, soy una persona que me gustan los desafíos y no la comodidad. Podría haber firmado en otro lado por tres años, o dos años mínimo, pero me gusta eso de intentar no estar relajado, de ir un poco apretado. Ellos también estuvieron de acuerdo con eso, así que por mí fenomenal.
- Relación con Sergio Pellicer.
Pues muy bien, es muy exigente. El trato conmigo es fenomenal. A él le gusta también estar con las bromas antes de empezar el entrenamiento, pero luego a la hora de entrenar, máxima seriedad y concentración. Los entrenamientos son muy dinámicos, muchos ejercicios con balón, hacemos mucho tema de físico, pero todo siempre relacionado con el balón. Por el momento, muy contento.
- ¿Qué potencial de plantilla se ha encontrado? Es la segunda más joven de la categoría...
Un grupo de jóvenes con mucha proyección, pero hay que saber que es Segunda y esta división no te perdona. Los chavales, la verdad que hay muchos que se están adaptando muy rápido. Los demás deben tener paciencia y formarse, esto al final es muy complicado. Como plantilla, la veo bien, competitiva.
Los jóvenes me han sorprendido porque pueden jugar aquí en un campo con 27.000 personas, que no todo el mundo lo puede hacer, y tienen ese desparpajo. Hay que intentar ayudarles en lo máximo posible, porque al final es el futuro del club, y para eso estamos también un poco la gente que tenemos un pelín más de experiencia, para ayudarles en lo que necesiten, y habrá momentos malos que necesiten un poco de tirón nuestro.
- No se habla ni de play off ni de ascenso. Los famosos 50 puntos y luego ir viendo.
El objetivo del equipo es ese, claro, conseguir los 50 puntos cuanto antes. Es el objetivo principal, y luego a partir de ahí, oye... si podemos soñar, vamos a por ello a muerte, pero hay que tener los pies en el suelo.
"El físico es mi punto fuerte, en los datos de sprint siempre estoy en la media de 34 y pico por hora, y peso 90 kilos, soy fuerte al choque".
- ¿Firmar en el Málaga es el mayor reto de su carrera?
Sí, el mayor. A nivel de entidad, a nivel de lo que es el club, de lo que mueve de afición y todo, es el mayor reto de mi carrera. He tenido mil aventuras y tal, pero a nivel de peso de club, el más importante y con diferencia.
- Viene de hacer 16 goles en Chipre. Diga una cifra de goles con la que estaría contento al acabar la jornada. Igualar esa cifra, ¿cómo lo ve?
Dios te oiga, si igualo esa cifra, lo firmo ahora mismo. Pero no me obsesiono con eso, ahora mismo mi objetivo principal es ponerme bien cuanto antes, a tono físico. Estamos trabajando mucho, con duros entrenamientos, y hago aparte trabajo extra. Yo soy más de la filosofía de intentar en cada partido hacerlo mejor, no de mirar a ver si hago diez o quince en una temporada, aunque ojalá que meta treinta en vez de quince.
- Importante lo de estar en forma por sus características de delantero corpulento, rápido y fuerte. Un entrenador que tuvo, el mítico Enrique Martín Monreal (Osasuna), le dijo que pesando 90 kilos no iba a jugar con él.
(Risas) Sí, sí, eso me dijo, fue gracioso. Eso es un pensamiento quizá un poco antiguo ya. Yo le dije que en su época, bueno... pero ahora si ves cómo está proyectado el fútbol moderno, ves a cada bicharraco que no tiene nada que ver. Al final es moverse con agilidad y bien y hay que ser eficiente, ¿sabes? Y que no son 90 kilos de grasa, precisamente. Estoy cuidado al límite y en ese sentido estoy fino. El físico es mi punto fuerte, en los datos de sprint siempre estoy en la media de 34 y pico por hora, y peso 90 kilos, soy fuerte al choque.
- Ha sido un trotamundos del fútbol: Australia, Vietnam, India, Chipre... ¿Málaga es una parada más del trayecto o un sitio donde asentarse?
No me sé estar quieto, me considero un nómada del fútbol, un mochilero. Me gustan los retos. De momento, no sé, lo mismo estoy aquí en Málaga y estamos contentos las dos partes y me quedo aquí diez años. En mi caso sería extraño (risas). Pero bueno, yo si estoy a gusto en un sitio... En Ibiza, por ejemplo, estuve tres años prácticamente. A lo mejor llega aquí la continuidad. De momento, a hacer las cosas como tienen que hacerse, a ponerme al cien por cien. Como digo yo: hay que poner el Lamborghini a tope y ya luego que corra.
"No soy un friki del fútbol. Hay muchos futbolistas que nos gusta desconectar. Ni de coña me pongo un partido de fútbol en casa".
- ¿Cuál es el mejor jugador con el que ha compartido equipo?
Te puedo decir, en defensa, probablemente Álex Gálvez. De extremos te diría el mítico Piti (ex del Rayo) y Nolito. En medio campo, pues Pape Diop. Hay varios. Con Manu Molina coincidí en Ibiza, nos escribíamos mientras se cerraba mi fichaje. Ese es un personaje de la leche.
- Un referente deportivo.
En cuanto a ética de trabajo y todo lo que ha conseguido, Cristiano Ronaldo.
- Jugador favorito actual.
Pues fíjate que tengo que decir una cosa: no hay ningún jugador que me enamore actualmente porque no me gusta tanto el fútbol como antes. Te hablo de la época de Ronaldo Nazario y demás. No soy un friki del fútbol, para nada. Hay muchos futbolistas como yo, que nos gusta desconectar. Ni de coña me pongo un partido de fútbol en casa. Imposible. Si acaso algún partido de equipos que me gusten, tipo Manchester City, pero por ejemplo, yo soy del Atlético de Madrid y no veo sus partidos. Antes había más esencia. Hay demasiados partidos, es una barbaridad.
- ¿En qué invierte su tiempo libre?
Estoy yendo mucho a la playita. El fútbol no entra en mi día libre. En la playa desconecto. Mi familia tiene casa en Nerja y veraneábamos ahí. El agua está aquí tremenda, estoy disfrutándolo como un enano. Voy cada dos por tres, desconecto de todo, me como un arrocito y para casa. Ahora estoy viviendo en Nerja, en esa misma casa, hasta que me den el piso. Me encanta esa zona de Nerja, aunque no conocía Málaga capital.
- Un sueño por cumplir en Málaga.
Ascender en el Málaga tiene que ser, pufff... quemamos España entera juntos. Si asciendes con esto [señala a las gradas de La Rosaleda], encima con lo locos que están aquí los hinchas... Y jugar en Primera ya sería poder morirme tranquilo.
- Una virtud y un defecto fuera del fútbol.
La sinceridad, que puede ser un arma de doble filo.
- Tres artistas siempre presentes en tu playlist.
Uno ya lo saben, que es Nino Bravo. Me gustan los clásicos. Y luego, pues me está gustando mucho Luis Cortés, pero tengo desde Andrea Bocelli o Julio Iglesias a Lady Gaga. Puedo escuchar de todo. La música en el vestuario la ponen los chavales, eso sí. Reguetón.
- Un mensaje para la afición: ¿Qué puede prometer Sergio Castel?
Voy a dar mi cien por cien y con eso van a estar contentos. He venido mentalizado. Si me respetan las lesiones, estoy bien y me pongo en forma ahora, podemos disfrutar tanto yo de ellos como ellos de mí.
Me gusta este chico. Tiene energía y la contagia. Eso es muy bueno para el vestuario y para los partidos. Ánimo chaval.