El Atlético de Madrid ha conseguido cerrar dos de las posiciones que solicitó su entrenador Diego Pablo Simeone reforzar de cara a la próxima temporada. La zona más retrasada del campo tanto en la zaga como en los laterales. Una zona en la que ha tenido más de un dolor de cabeza el técnico rojiblanco para realizar onces que fueron totalmente de su confianza.
De cara a los refuerzos de la zona central se han cerrado las incorporaciones de Caglar Soyuncu y el uruguayo Santiago Mourinho. El primero llega procedente de la Premier League con la carta de libertad. El Leicester City cayó de la Primera División inglesa y perdió además a uno de sus bastiones en la zona defensiva. El caso del charrúa, llega procedente del Racing de Montevideo. Según diversas fuentes el precio ronda los 3 millones de euros. Parte de ese dinero irá destinado al Nacional de Montevideo que tiene el 20% de los derechos del jugador. El sudamericano podría terminar saliendo cedido si el técnico lo viera necesario.
En lo referente a los carriles, el cuadro rojiblanco está cerca de cerrar las entradas de Javi Galán y César Azpilicueta. El primero de cara al carril zurdo, donde esta temporada la baja de Reinildo y las pocas oportunidades que se ha dado a Sergio Reguilón, que llegaba cedido desde el Tottenham; permite a Simeone tener un perfil distinto y con experiencia en LaLiga Santander. Llega procedente del Celta, donde se marchará como parte del pago de su fichaje Manu Sánchez. Otro de los futbolistas que llega para reforzar las bandas de la defensa es el navarro, que llega gratis desde el Chelsea, a pesar de tener un año más de contrato con los blues.
El internacional español es un valor importante para el entrenador, ya que su polivalencia permitirá al preparador argentino colocarle en diferentes posiciones. De esta manera, el equipo ha conseguido reforzar una zona que en las últimas campañas se había mostrado algo frágil.