El final de la temporada para el Sporting de Gijón llega cargada de movimientos en su vestuario. Los rojiblancos se quedaron a las puertas del ascenso tras quedar apeados en la primera ronda del play off y ahora es el momento de los fichajes y las salidas. En este último apartado ya se están produciendo cambios. Hace unas semanas se conoció que Pablo Insua saldría del club y ahora le ha tocado despedirse a Cali Izquierdoz. Ya se sabía que el central, que cuenta con el interés de Lanús, no iba a continuar después de esta temporada en la que terminaba contrato y por eso ha querido despedirse días después de concluir el trabajo.
Lo hizo con una extensa y emotiva carta en sus redes sociales en la que recuerda a todo el mundo con el que ha compartido vestuario en el club durante estos dos años. También agradece el trato tanto en el Sporting como en la ciudad y terminó deseándole suerte a la entidad de cara al futuro.
Estas fueron las emotivas palabras de despedida de Cali Izquierdoz al sportinguismo:
"Se termina otro capítulo de mi carrera. Hoy toca despedirme de tanta gente que nos ayudó a ser muy felices durante estos dos años. Tanta gente que nos recibió y nos abrió la puertas de sus casas como si fuéramos familia. Pasamos dos años intensos, vivimos de todo. Malos y buenos momentos, pero siempre unidos buscando lo mejor para el Sporting.
Tienen un club maravilloso, pronto volverá a donde se merece. Pero este es el camino. Gracias afición por el apoyo incondicional, por permitirme vivir momentos increíbles en el Molinón y porque en cada salida, nunca estábamos solos. La Mareona siempre está presente. Gracias a toda esa gente que trabaja en el club, cuando digo toda, es TODAAA. Son los más!!
El compromiso y sentido de pertenencia que tienen no lo vi en ningún lado. Para ustedes no es un trabajo, es EL trabajo. Sienten los colores como nadie y dan todo lo que pueden para ayudar a su querido Sporting. Ese del que nacen hinchas. Es espectacular.
Gracias Abelardo, Miguel Ángel Ramírez, y sus respectivos cuerpos técnicos por el respeto y por permitirme seguir aprendiendo cada día. Fue un placer trabajar con ustedes. A Orlegi por confiar en mí y darme la oportunidad de vestir esta hermosa camiseta, sin duda que con ustedes es el camino para llevar al club a lo más alto.
Por último y de manera especial agradecerle a mis compañeros (a los de ahora y los de antes) por cada día, cada entrenamiento, comida, viaje, partido. Nos faltó poquito para cumplir el objetivo, pero lo dimos todo y eso vale más que cualquier otra cosa. Fue fantástico compartir vestuario con cada uno de ustedes. Me llevo varios amigos para siempre. Les deseo lo mejor a todos, estaré pendiente desde donde me toque.
Con mi familia nos vamos siendo Sportinguistas y con un pedacito de corazón Asturiano. Gracias infinitas y PUXA SPORTING".