Julen Lopetegui insiste en el fichaje de Ferran Torres y el Barcelona se abre a su salida
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El West Ham perfila el mercado en busca de un delantero
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El jugador, convencido de triunfar en el Barça
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Julen Lopetegui quiere llevarse a Ferran Torres al West Ham. El valenciano, concentrado con España en la Eurocopa, no se plantea cambiar de aires, pero en el FC Barcelona no descartan que se pudiera producir una salida en caso de que llegara una oferta interesante. Sobre todo porque las necesidades económicas del club son más que evidentes.
Según informa The Sunday Express desde tierras británicas, Lopetegui ha pedido a su nuevo club el fichaje de un delantero. Durante las últimas semanas han sonado nombres como Luis Guilherme o Youssef En Nesyri, añadiendo ahora la opción de que Ferran sea el elegido.
El medio inglés asegura que el West Ham ya está dando los primeros pasos para tantear su fichaje porque son conocedores de que el Barça necesita vender. Según informa Mundo Deportivo, el Barcelona cuenta con Ferran para el próximo curso, pero no descartarían una salida en caso de que llegara una buena oferta.
Ferran Torres no quiere escuchar ofertas
Todo esto choca, en cualquier caso, con los planes del propio jugador. Porque Ferran quiere quedarse en el Barça, quiere triunfar con la camiseta blaugrana, no quiere cambiar de aires en verano y ni siquiera está dispuesto a escuchar ofertas.
El valenciano tiene la autoestima por las nubes y está convencido de su potencial pese a que lleva desde el mes de enero sin marcar un gol en un partido oficial. Todo ello, eso sí, con una lesión muscular de por medio. Sí marcó en un amistoso con la selección española.
Se llegó a poner en duda su presencia en la Eurocopa, pero finalmente entró en la convocatoria de Luis de la Fuente, aunque ya ha perdido el rol de titular que tenía años atrás. Ante Croacia, en el debut de España, jugó los últimos 20 minutos y no fue capaz de aprovechar los espacios que dejó la zaga croata.
Sea como fuere, Ferran parece estar convencido de quedarse en el Barça pese a los cantos de sirena. Otra cosa es la postura del propio club azulgrana, que llegó a pagar 55 millones de euros en enero de 2022 por un jugador que rindió a buen nivel en sus primeros meses y ha ido hacia abajo en los dos últimos cursos.