Si alguien conoce a Ilaix Moriba, el último nombre en ser relacionado con el centro del campo del Sevilla, es García Pimienta. El entrenador blanquirrojo le vio crecer en las categorías inferiores del FC Barcelona y cuando el chico saltó al primer equipo, no tuvo dudas sobre él. El destino de ambos podría reencontrarse en el Sánchez-Pizjuán y el extécnico de Las Palmas lleva mucho tiempo advirtiendo sobre el potencial del centrocampista.
Corría el año 2021 e Ilaix Moriba sorprendía a todos en LALIGA EA Sports. Ronald Koeman, en un FC Barcelona en reconstrucción, le otorgó la oportunidad de debutar con el primer equipo y el chico respondió. Disputó aquel año 18 encuentros y el RB Leipzig apostó por él.
Su marcha a la Bundesliga, posiblemente, fue precipitada, y es algo que el propio García Pimienta veía de manera previa. "Ha quemado etapas más rápido. Es juvenil de segundo año y la temporada pasada, por circunstancias, acabó siendo un jugador importante en el filial, sobre todo en el playoff. Tiró del carro como si fuera un veterano", decía cuando aún era jugador del Barça.
"Tiene mucha personalidad, puede jugar en el Barça y en cualquier equipo. Es muy potente, muy fuerte y entiende muy bien el juego. Tiene llegada y gol, como se ha visto, pero es muy joven y debe ir paso a paso. Ahora está en el primer equipo, pero necesita jugar", argumentaba abriéndole la puerta a una posible vuelta al filial si era necesario.
Desde entonces, Ilaix probó suerte en la Bundesliga, en el Valencia y, por último, en el Getafe. Desde que llegase en enero, el ex del Barça disputó 14 encuentros con el equipo entrenado por José Bordalás y en El Coliseum soñaban con prorrogar su cesión.
Si nada se tuerce en demasía, Ilaix Moriba se reencontrará con García Pimienta en el Sevilla. Un jugador, un entrenador y un club buscando recuperar su mejor versión ante una afición que será muy exigente.