En el horizonte el Real Madrid no descansa por traer nuevo fichajes que ilusionen en el Santiago Bernabéu. Aunque la plantilla que ha formado Florentino Pérez asusta a cualquiera, el club blanco está cada vez más cerca de cerrar la llegada de la perla del fútbol argentino, Franco Mastantuono.
Desde hace varios meses varios emisarios viajaron para conocer de cerca su fútbol y transmitir que deben seguir los mismos pasos que hicieron con el caso de Endrick: paciencia pero efectividad. Conscientes de que no son los únicos interesados, el Real Madrid sigue dando grandes pasos para que el mediocampista vista la elástica merengue a partir de 2025. Y, por mucho que su agente desvíe los tiros, la posibilidad de cerrar un acuerdo se antoja más cerca que lejos.
Su talento pide a gritos un salto de calidad en su carrera marchándose a Europa y, sabiendo lo que están pagando por jugadores como él, River le renovó a toda prisa para subir la cláusula hasta los 45 millones de euros. Una cantidad que ya aseguró el club blanco que no estaba dispuesto a asumir, aunque eso no ha enfriado la operación.
Según informa Diario As, la puja inicial de los 20 millones ha subido ahora a los 25 'kilos' como medida de acercar posturas por parte de Solari, el encargado de negociar con el club albiceleste y el que más ha insistido al Real Madrid por él. Un negocio que pasó en la recta final de la pasada temporada por muchas dudas pero de las que se han despejado para ir a por un jugador que podría marcar un época.
Aún tiene 16 años (el próximo 14 de agosto cumple 17) y la hora de ruta sería la misma que la del delantero brasileño: fichar ya, jugar un año en River y aterrizar en Madrid el próximo verano cuando cumpla la mayoría de edad.
Equipos como Barça y City le han sondeado pero el único que ha ido de frente y a por todos ha sido el Real Madrid, algo que ha valorado Mastantuono a la hora de decidir. Aún no existe ningún acuerdo y no se puede catalogar como inminente, pero los pasos que están dándose desde Chamartín apuntan a que su fichaje sigue dando pasos, a su ritmo, pero se están haciendo.
Con una zurda exquisita y un golpeo brillante, el mediapunta demuestra en cada partido que ha nacido para jugar en un grande. El silencio significa trabajo y, cuando menos se habla del Real Madrid de un fichaje, es porque se están pasando cosas en Valdebebas.