El Valencia CF no ha concluido la temporada y todavía no sabe si terminará llegando a Europa, pero parece prácticamente seguro que no descenderá. En ese escenario, la dirección deportiva del Valencia CF ya trabaja sabiendo que tendrá necesariamente que firmar un delantero (o dos), un portero y un lateral derecho, si no hay ampliación de Foulquier. Después, en función de las ventas o las salidas, deberá reforzar también otras posiciones (por ejemplo, un central si sale Mosquera). Con seis jugadores que acaban contrato (Foulquier, Jaume, Sadiq, Barrenechea, Iván Jaime, Rafa Mir y Mamardashvili), el Valencia, un año más, tendrá que hacer encaje de bolillos para ofrecerle a Carlos Corberán una plantilla en condiciones de competir y no sufrir. Los fichajes del Valencia vendrán, salvo giro radical, marcados por la austeridad.
No hace falta ser un lince de las matemáticas para saber que, a priori, el perfil de los fichajes del Valencia CF para la temporada 2024-25 serán jugadores cedidos o de bajo coste a menos de que, con Kiat Lim como nuevo presidente, el club busque ampliar su coste de plantilla o lo logre vendiendo jugadores para después invertir en refuerzos.
A día de hoy el coste de plantilla del Valencia CF roza los 80 millones de euros, si eso se reparte entre 25 jugadores el coste por jugador y por fichaje es de alrededor de 3.2 millones de euros por futbolista y año. Esta cantidad incluye salario más amortización del fichaje.
Está claro que esos 3.2 millones son una media y que habrá jugadores que cuesten mucho menos de esas cantidades. Por ejemplo, un canterano que sube al primer equipo no cobra un sueldo elevado y no hay que pagar amortización por él.
Por el contrario, hay jugadores como José Luis Gayà o Mouctar Diakhaby que ocupan más espacio en el coste de plantilla y eso es necesario compensarlo.
Esta situación complica sobre manera acometer fichajes como el de Sadiq Umar o Enzo Barrenechea, por los que había que pagar traspasos de diez millones de euros y se les presupone unas fichas altas. Eso implicaría hacerles contratos largos para que su amortización baje y así poder asumir su ficha.
Además, para fichar a Sadiq o Barrenechea, el Valencia CF tiene que reforzar otras posiciones con jugadores cedidos, más baratos o de la cantera, pues un futbolista de la talla de Sadiq ocupará no menos de 5 millones del coste de plantilla de los que tiene el Valencia.
A favor de esta situación queda el hecho de que varios futbolistas acaban contrato y aligerarán el coste de plantilla: Los cedidos Rafa Mir, Iván Jaime, Max Aarons etc.... y Jaume y Foulquier. El caso del lateral derecho galo es particular. Corberán lo quiere y el Valencia, a la baja, se lo pensará como publicaba este lunes ElDesmarque. Ahora bien, su sueldo de 1 millón neto es inasumible para un lateral que, con el regreso de Thierry tiene el rol de suplente. Dicho esto, su doble perfil lateral-central puede cambiar de opinión al club que se planteará hacerle una oferta de renovación a la baja.