La edad media del Mundial Femenino de Australia y Nueva Zelanda 2023 no es muy elevada salvo unas selecciones concretas que se alejan de la línea general de las selecciones clasificadas para la Copa del Mundo. Concretamente destacan el contraste entre futbolistas muy veteranas que alcanzan los 40 años como la nigeriana Onome Ebi y la canadiense Christine Sinclair con la juventud de otras como la costarricense Brittany Vásques, la italiana Giulia Dragoni o la coreana del sur Casey Phair, todas ellas con apenas 16 años.
De 32 las selecciones que disputan el Mundial, el equipo más veterano es el de Corea del Sur. Tienen un promedio de 30,04 años ya que solo once de ellas están por debajo de la treintena de edad.
Otras selecciones le siguen muy de cerca como República de Irlanda con una edad media de 28,347 años, Estados Unidos; con 28,26 años, y Brasil; con 27,521 años.
Por contra, el plantel más joven es Haití con una edad media de 23,21 años. Otras también tienen un promedio bastante joven como Japón y Costa Rica, con un promedio de 23,60 y 23,73 respectivamente.
La selección española buscará dar la sorpresa en Oceanía con una edad media ajustada a la media general, de 25,21 años, en una plantilla formada por jugadoras con experiencia como Alexia Putellas (29 años), Irene Paredes (32 años) o Jennifer Hermoso (33 años) con jóvenes talentos como Salma Paralluelo (19 años), Athenea del Castillo (22 años) o Eva Navarro (22 años).
Jorge Vilda ha juntado 23 futbolistas que quieren olvidar la eliminación en octavos contra Estados Unidos en Francia 2019 y meterse entre las favoritas para pelear un título que, aunque sea un sueño, siempre es posible. Aunque la edad no es algo crucial para ser campeón, la juventud es sinónimo de frescura y menor riesgo de sufrir lesiones musculares.