La futbolista, Verónica Boquete ha dado unas declaraciones sobre el beso que le robó Rubiales a Jenni Hermoso en la celebración de la victoria de la selección española en el Mundial. "El problema no es si se va Rubiales o no se va Rubiales, el problema es que es una cultura y un sistema dentro de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) que es necesario cambiar", ha explicado la excapitana de la Selección española de fútbol.
La jugadora de la Fiorentina ha dedicado unas palabras sobre la polémica en una entrevista en RNE: "Lo único que ha pasado en estos siete días es que se ha visto públicamente lo que antes sucedía en privado y en grupos reducidos". Además, ha insistido en que "el problema en el fondo es mucho más importante".
"Queda mucho" de Rubiales, como las "140 personas aplauden y se ponen de pie" en el discurso que dió durante la Asamblea General Extraordinaria de la RFEF. "El problema no es si se va Rubiales o no se va Rubiales, el problema es que es una cultura y un sistema dentro de la RFEF que es necesario cambiar", ha continuado explicando la excapitana de la Selección española y que se puede ver en el vídeo de la parte superior.
Verónica Boquete ha confirmado que este acto que se ha visto públicamente no es la primera vez que ocurre: "Esos límites siempre se habían sobrepasado, porque desde que tenemos memoria todas las que hemos estado allí hemos vivido situaciones desagradables y da igual quién esté al frente". Luis Rubiales ha destapado "una manera de actuar y de ser" de la RFEF.
También ha lanzado un mensaje a todos los que apoyan o creen que el acto del presidete de la RFEF "no es para tanto". "Mucha gente en España cree que ese beso no es para tanto, aunque al menos saben que hay unas consecuencias y que pueden ser graves. Es la primera manera de frenar eso".
Ciertamente hay más rubiales, tanto en el deporte como en otros ámbitos, ya sean laborales o de ocio. Hay que erradicar los abusos y la desigualdad, hacer frente a los abusadores y sus apoyos, apoyar el respeto y la igualdad. Adelante el fútbol femenino. Adelante el feminismo. Las canchas, los campos también son nuestros.
Se puede decir más alto, pero no más claro. Rubiales es una punta del iceberg; puede "abandonar el grupo", pero el problema no es él solamente, sino todos aquellos que siguen presentes y que son cómplices de las situaciones que estas CAMPEONAS han sufrido. Hay de fondo una mentalidad encubierta, generalizada y normalizada, que esl el verdadero problema, pues ha permitido una impunidad muy injusta. Tengo dos hijas que juegan a fútbol; todavía son niñas pero me alegra pensar que para cuando ellas tengan edad de jugar profesionalmente, ( lo consigan, o no, ), todos aquellos que aplaudieron el vergonzoso discurso de Rubiales, estarán jubilados
Se puede decir más alto, pero no más claro. Rubiales es una punta del iceberg; puede "abandonar el grupo", pero el problema no es él solamente, sino todos aquellos que siguen presentes y que son cómplices de las situaciones que estas CAMPEONAS han sufrido. Hay de fondo una mentalidad encubierta, generalizada y normalizada, que esl el verdadero problema, pues ha permitido una impunidad muy injusta. Tengo dos hijas que juegan a fútbol; todavía son niñas pero me alegra pensar que para cuando ellas tengan edad de jugar profesionalmente, ( lo consigan, o no, ), todos aquellos que aplaudieron el vergonzoso discurso de Rubiales, estarán jubilados
Sois unas sin vergüenzas, solo estáis pensando en solis jarritas de porcelana, por que no sacáis el morreo del catalán a la del Barcelona, y estas que se están rasgando las vestiduras y se callan como p. No tenéis nada, fuera el fútbol femenino.
Sois unas sin vergüenzas, solo estáis pensando en solis jarritas de porcelana, por que no sacáis el morreo del catalán a la del Barcelona, y estas que se están rasgando las vestiduras y se callan como p. No tenéis nada, fuera el fútbol femenino.