Es Noticia

El anunciado declive del fútbol en Estados Unidos ya es realidad

ElDesmarque

La despedida del histórico técnico Jurgen Klinsmann, el pasado noviembre, no fue más que la antesala al retroceso americano, incapaz de haberse alzado sobre equipos a priori muy inferiores. Más allá de los resultados del combinado nacional, el problema reside en la base de los equipos, como así lo refrendó el propio ex técnico, que señaló que Estados Unidos jamás avanzaría si la base era la aportación de la MLS.

Ante la sorpresa de todos, Estados Unidos cayó apeada del Mundial de Rusia 2018. Lo que se temía llegó, el retroceso del fútbol estadounidense a nivel de selección se hizo patente con la eliminación que sufrió el equipo norteamericano, tras haber perdido por 2-1 el último partido del Hexagonal de la Concacaf ante Trinidad y Tobago.
La derrota ante Trinidad y Tobago dejó latente el declive sufrido en estos últimos años, condenados por la división interna del vestuario y la incomprensión entre los más jóvenes y las "viejas" glorias del combinado nacional. A pesar de posicionarse con todo a su favor para obtener el pase, los norteamericanos perdieron la credibilidad ganada en cursos anteriores de vencer los partidos decisivos. Una humillación culminada ante un equipo que solo había logrado vencer una vez en todo el hexagonal.
Algo que le puede ahora servir de atenuante y de justificación a Klinsmann, después de verse como la selección bajo la dirección de Bruce Arena no fue más eficaz, consistente o mejor que con el entrenador alemán, despedido, sobre todo al ver el ridículo y humillación que sufrió ante Trinidad y Tobago. Pero lo más grave que se ha visto en la selección bajo la dirección de Arena es la falta de entusiasmo, espíritu de lucha, disciplina y sacrificio que han tenido la mayoría de los jugadores en los partidos decisivos.
Precisamente, cualidades claves en la concepción del fútbol estadounidense que posee una gran fuerza física y preparación, pero carente de técnica, visión del juego y saber moverse por el campo sin balón.
El único que demostró que ha aprendido los fundamentos del fútbol fue el joven centrocampista Christian Pulisic, de 19 años, que juega con el Borussia Dortmund y que descubrió Klinsmann, que fue el que primero lo llamó. De ahí la insistencia del técnico en pedir que los jugadores jóvenes estadounidenses se fuesen a competir a Europa, no se quedasen en la MLS, una liga convertida en un cementerio de elefantes, que además compiten con reglas que nada tienen que ver con el fútbol mundial.
La eliminación de Rusia 2018 no sólo deja a Estados Unidos fuera de la élite mundial sino que confirma que el modelo de la liga profesional con 22 equipos, que será incrementada a 24 la próxima temporada, no les ha hecho ser mejores como selección si no todo lo contrario han retrocedido de manera alarmante en su nivel futbolístico.

Escribir comentario 0 comentarios
Deja una respuesta
Su comentario se ha enviado correctamente.
Su comentario no se ha podido enviar. Por favor, revise los campos.

Cancelar