"Estoy un poco triste por el penalti. Fue una responsabilidad que asumí y ahora solo me queda trabajar el doble", dijo el futbolista peruano, consolado por todos sus compañeros.
"Estoy agradecido con las personas que me apoyan pero también con los que me critican para darme cuenta de las cosas pero sobre todo el apoyo de los compañeros", añadió Cueva que explicó que el golpeo se le marchó alto.
"Casi siempre le pego a ese lado pero se me marchó alto. Erré y solo queda corregirme", dijo el jugador, que llegó abatido al descanso aunque luego se recuperó.
"Estuve triste. Es natural en un jugador que falla el penalti. pero salí luego de la mejor manera y creo que estuve bien. Pero solo me queda levantar la cabeza y seguir", dijo. "Creo que cualquier compañero aquí tiene la posibilidad de tirarlo. Me tocó a mí en esta ocasión y solo queda corregirme. Voy a dar lo mejor de mí en cada partido", concluyó Cueva.