Choo fue un muro esta tarde en el estadio Kazán Arena y frenó todas y cada una de las embestidas de la 'Mannschaft', que dice adiós a una Copa del Mundo en la fase de grupos por primera vez desde 1938.
"Todos los futbolistas y el seleccionador jugamos por la gente de Corea", explicó el portero al término del partido.
Los surcoreanos necesitaban derrotar a Alemania por una ventaja de dos goles o más y que México superara a Suecia para poder estar en octavos de final. Sin embargo, el equipo escandinavo no dio opción al combinado de Juan Carlos Osorio en Ekaterimburgo (3-0), por lo que Corea dice también adiós al Mundial a las primeras de cambio.
"No sabíamos cómo iba el otro partido. Hasta que terminó nuestro encuentro nadie nos dijo nada. Estábamos felices por haber derrotado al campeón, pero también tristes y decepcionados por ser eliminados, y por eso lloramos al final del encuentro", dijo Choo.