Alves, de 36 años, es uno de los veteranos de la selección de Portugal, que atesora la experiencia de 96 internacionalidades, y está convencido de que no es el momento de volver a casa, tal y como señaló antes del entrenamiento en el campamento base en Kratovo, en las cercanías de Moscú.
Advirtió el central luso que no deben preocuparse solo del dúo atacante estelar del cuadro charrúa, Edinson Cavani-Luis Suárez, ya que "toda la selección de Uruguay tiene potencial". "Son grandes jugadores, pero Portugal ha demostrado que puede jugar contra cualquier rival y estamos preparados para enfrentarnos a cualquier rival".
Consideró que una de las fortalezas de Portugal es el bloque, el conjunto, sobre todo a la hora de defender, y opinó que el encuentro no será un duelo Cristiano Ronaldo-Luis Suárez.
Aún no ha debutado pero está a punto para cuando Fernando Santos decida contar con él: "Estoy siempre muy motivado. Trabajo todos los días para merecer una oportunidad. Creo que va a llegar. Todos los que no han jugado han estado trabajando para ayudar a Portugal a ganar", dijo.
Para Bruno Alves estar en el Mundial "ya es una victoria, compartir con todos estos grandes jugadores es un triunfo". "Aunque no estoy jugando, soy feliz", aseguró el defensa portugués.
La selección de Portugal, que terminó segunda del grupo B tras España al ceder un agónico empate en el último choque frente a Irán, se enfrentará en los octavos de final a Uruguay, primera del A, este sábado en Sochi a partir de las 21.00 hora local (20.00 CET/18.88 GMT).