El capitán de Inglaterra, Harry Kane, se ha paseado estos días por la concentración de la selección con un reloj, de la marca Rolex, adornado con la bandera multicolor. Una joya muy especial en la que el delantero del Tottenham se ha gastado una auténtica millonada.
A Kane le vetaron el uso de un brazalete con la bandera arcoíris, en apoyo a la iniciativa "OneLove", a favor del movimiento LGTBI, después de que la FIFA decidiera imponer sanciones deportivas a aquellos que lo llevaran. Una campaña que tenía el objetivo de apoyar a la diversidad e igualdad hacia todas las personas y que el mismo Kane llevó puesto en el partido contra Italia en la Nations League.
Junto a Inglaterra también se habían implicado a participar otras nueves selecciones como Alemania con Neuer, Gales, Bélgica, Dinamarca, Francia, Noruega, Suecia, Suiza y Países Bajos.
En respuesta a esta decisión, Kane ha vestido un Rolex, del modelo Daytona, con la esfera multicolor y bañado en oro rosa de 18 quilates. Su precio en el mercado se acerca a los 700.000 euros. Nuevo desafío del delantero a la FIFA, que ha prohibido cualquier reivindicación LGTBI en los partidos del Mundial de Qatar.