Xhaka hace explotar el banquillo rival: el gesto que desencadena la tangana del Serbia-Suiza
Como era de esperar, el partido entre Serbia y Suiza estuvo cargado de tensión. Fue todo un partidazo con goles y muchas ocasiones, pero era poco probable que terminara sin alguna trifulca dados los precedentes y la rivalidad que existe entre ambas selecciones. Uno de los protagonistas en este sentido fue Granit Xhaka.
En la segunda parte, cuando el partido agonizaba, Xhaka protagonizó un gesto que hizo estallar al banquillo de Serbia. El jugador suizo se llevó las manos a sus partes mientras miraba a los rivales, lo que provocó que estos salieran del banquillo en su búsqueda.
Ahí se formó una de las tanganas del partido pero no fue la única. Cerca de la portería que defendía el meta de Serbia tuvo lugar otro enfrentamiento, esta vez con la presencia de más protagonistas. De nuevo, Xhaka estaba de por medio aunque por suerte la sangre no llegó al río.
El partido terminó y Suiza consiguió el billete para los octavos de final, mientras que Serbia dice adiós mostrando una pobre imagen y sumando un solo punto en toda la primera fase. Más allá de las trifulcas, ambas protagonizaron un auténtico espectáculo de fútbol digno de destacar en todo lo que ha transcurrido del Mundial hasta la fecha.