La falta de civismo, con heridos y numerosas cargas policiales, empañó parte del triunfo liguero del Sporting de Portugal, que anoche ganó el campeonato portugués 19 años después, hecho que desató la euforia entre la hinchada, que se echó a las calles de Lisboa. En el vídeo superior, unas imágenes que jamás deberían haberse producido.