La tragedia de Heysel durante la final de la Copa de Europa de 1985 entre Liverpool y Juventus, con 39 muertos y más de 600 heridos en una avalancha provocada por los ultras 'reds' provocaron que los 'hooligans' quedaran en el punto de mira. En el fútbol inglés, como también sucedería posteriormente en España (al menos fuera de los palcos), las autoridades prohibieron el consumo de alcohol en las gradas y esta norma podría quedar revocada casi 40 años después, al menos para el fútbol femenino.
Los estadios de fútbol pueden vender alcohol en la actualidad, pero este no puede ser consumido en las gradas, solo en los vomitorios y bares de los estadios, tras una medida de 1985 que pretendía frenar el 'hooliganismo' y los problemas en los estadios ingleses.
Sin embargo, esta medida no entra en vigor en otras competiciones, como la NFL, que en sus tres partidos jugados en Londres esta temporada sí permite el consumo de bebidas alcohólicas entre el público.
Ahora, Nikki Doucet, presidenta ejecutiva de la Women's Super League (la Premier League inglesa), ha confirmado en declaraciones a la cadena británica BBC que existen conversaciones para probar el consumo de alcohol en las gradas de los partidos femeninos.
"Creo que el comportamiento de nuestros aficionados es distinto", aseguró Doucet en la cumbre "Leaders Week" en Londres.
"Hay que dar opciones a los aficionados, al tiempo que mantenemos su seguridad y somos responsables", añadió.
En la revisión del estado del fútbol inglés de 2021 se recomendó la eliminación de la prohibición del alcohol en las gradas, con una serie de pruebas primero en la Quinta y la Cuarta división de la pirámide inglesa.
Mark Roberts, jefe de seguridad del fútbol, aseguró que la prohibición debería mantenerse y que poder beber antes del partido y en el descanso es un buen equilibrio.