El Fenerbahce y el Galatasaray se citaron este miércoles en un partido que paralizó Turquía de cuartos de Copa y que tuvo el enésimo lío por parte de José Mourinho, que se la tiene jurada a su rival. El técnico luso no se tomó muy bien el quedar eliminado de otra competición y agarró de la nariz a Okan Buruk, el entrenador del conjunto visitante, que acabó por los suelos mientras retiraban a vestuarios a The Special One.
Victor Osimhen, que apenas está dejando participación como titular a Álvaro Morata en su nueva etapa en Estambul, marcó los dos goles del Galata para vencer 1-2 en el Sukur Saracoglu. Precisamente, en el momento del cambio de nigeriano por el capitán de la Selección Española en el tramo final, comenzó una lluvia de objetos que provocó una tangana importante entre varios miembros de ambos clubes.
El árbitro solventó la situación con tarjetas amarillas como a Rolland Sallai, Edin Dzeko, Eren Elmaili, que estaban en el campo, y a otros fuera del césped como Irfan Kahveci, Milan Skriniar o Victor Osimhen que se encararon en la banda, al lado de los banquillos. Además, vieron la roja, también fuera del campo, Baris Alper Yilmaz y Demirbay, del Galatasaray y Mert Hakan Yandas, del Fenerbahce.
La tensión se mantuvo y el tiempo añadido se alargó un cuarto de hora. El Galatasaray amarró la victoria por 2-1 y la clasificación. Al término del encuentro, Mourinho, que en su primera campaña en Turquía podría quedarse sin título alguno, persiguió y se encaró con el preparador del Galatasaray al que tiró de la nariz. Buruk cayó al suelo y miembros de su equipo tuvieron que llevarse al preparador portugués al vestuario.
MOURINHO'DAN OKAN BURUK'A FİZİKSEL MÜDAHALE! pic.twitter.com/YLlNiSxIwQ
— Fotomaç (@fotomac) April 2, 2025
El Galatasaray en el que milita Álvaro Morata, que jugó los últimos cinco minutos como sustituto del nigeriano Victor Osimhen, autor de los dos goles, alcanzó las semifinales de la Copa de Turquía de la que cayó eliminado el Fenerbahce de Jose Mourinho (1-2). Un duelo que estuvo cargado de tensión, especialmente en los últimos minutos.
El conjunto visitante que dirige Okan Buruk aprovechó el acierto de Osimhen que hizo los dos goles que clasificaron a su equipo y le citaron con el Konyaspor, que el martes eliminó al Iskenderunspor, de tercera categoría.
El nigeriano anotó el primero de los tantos en el Ulker Stadium Sukru Saracoglu a los 10 minutos tras recibir un balón de Baris Yilmaz e hizo el segundo en el minuto 28, de penalti, señalado por una mano dentro del área del serbio Filip Kostic.
En el añadido de la primera mitad, el Fenerbahce acortó distancias después de que el polaco Sebastian Szymanski batiera a Gunay Guvenc tras un centro del brasileño Talisca.
Morata, suplente al principio, saltó al campo en el minuto 85 en lugar de Osimhen. Tras todo el lío con el reparto de tarjetas y unos últimos minutos sufriendo, el Galata selló su pase a las semifinales coperas buscando el doblete con la Superliga, donde marcha líder aventajando al Fenerbahce en seis puntos con un partido más.
Que se puede esperar de un maleducado y bochornoso tipejo.