El costarricense Celso Borges, centrocampista del Deportivo, ha reconocido que el equipo gallego no podía "dejar ir" los puntos que se le escaparon ante el Girona (1-2) en el estadio de Riazor."Estamos dolidos porque es un partido en casa contra un rival al que podíamos ganar y cuando no lo haces es difícil, muy complicado. Reflexionaremos para ver qué ha pasado, pero hoy es complicado", admitió.
"Eran puntos en casa que no podíamos dejar ir y ahora mismo estamos muy molestos con nosotros mismos por no haberlo hecho bien", añadió.
Sobre los silbidos y cánticos contra el equipo tras el pitido final, Borges afirmó que "la gente tiene toda la libertad de expresarse como quiere".
"Viene a ver a su equipo ganar y es entendible todo esto. Nosotros intentaremos hacerlo mejor la próxima vez y darles una alegría", señaló.