El pasado 31 de marzo se vivió un nuevo capítulo de racismo en el fútbol español. Cuando apenas quedaban 10 minutos para finalizar el encuentro, el partido quedó suspendido por unos insultos racistas provenientes de la grada local en el partido que enfrentó a Sestao River y Rayo Majadahonda.
Cheikh Sarr, portero del equipo madrileño, fue la víctima de las ofensas xenófobas por parte de algunos aficionados. En ese momento, el portero se encaró con el grupo de seguidores que le habían insultado y agarró la bufanda de uno de ellos. Fue entonces cuando el colegiado decretó el final del partido al retirarse los jugadores del equipo visitante del terreno de juego.
Jorge Casado, capitán del Rayo Majadahonda, desveló en El Larguero algunos de los insultos que tuvo que escuchar Sarr. “Puto negro de mierda y le han hecho gritos del mono. He visto a Cheikh en la grada y sé que si estaba ahí era por eso. Además, en la grada se han oído insultos de putos españoles”, explicó.
Desde ElDesmarque, hemos hablado con Iñaki Acha, vicepresidente del Rayo Majadahonda, sobre el último incidente racista vivido en el fútbol español.
Iñaki Acha se encontraba viendo el partido junto al presidente del Sestao River. Explicó que, cuando el equipo local anotó el 2-1 y vio que Cheikh Sarr iba hacia el público, tuvo clarísimo que había habido insultos racistas.
"Vi que fueron los compañeros y lo sacaron de allí. Jorge Casado retiraba a los jugadores y en ese momento bajé al vestuario. Me encontré con un chico totalmente destrozado, con la mirada perdida en el suelo y medio llorando", comentó.
El vicepresidente habló con los capitanes y decidieron que no querían volver a salir a jugar. "Hicimos las gestiones oportunas, se puso el protocolo antirracismo y se desalojó esa grada", explicó.
Tras ello, el colegiado les preguntó si querían salir a terminar el partido, pero el vestuario no quiso salir. "Se lo transmitimos al árbitro, se cerró el acta y se suspendió el partido", concluyó.
Puedes ver la entrevista a Iñaki Acha en el vídeo situado en la parte superior de la noticia.
Tanto el jugador como el propio club están pendientes de las posibles sanciones que puedan acarrear los hechos transcurridos durante el partido. El guardameta se expone a una sanción de entre cuatro a ochos partidos por su acción con el aficionado.
Por otra parte, el Rayo Majadahonda puede ser penado con un doble castigo: que le den el partido por perdido con un resultado de 3-0 y una deducción de tres puntos por suspender el encuentro. Además, el colegiado del mismo no anotó en el acta los insultos racistas a Cheikh Sarr.