Paco Jémez, entrenador del Rayo, dejó este martes abierta la posibilidad de salir del club al acabar la presente temporada si se mantiene el enfrentamiento entre una parte de la afición y la directiva, puesto que aseguró que no quiere "estar en un sitio que es una guerra continua".
La huelga de animación que está llevando a cabo desde principios de temporada la peña Bukaneros, el grupo de aficionados que ocupa el fondo del estadio, ha provocado que el equipo se sienta menos respaldado sobre el césped y el espectáculo visual y sonoro que se veía en las gradas se haya reducido.
"El hecho de que parte de nuestra afición haya tomado la decisión de no animar va en perjuicio del equipo. Se lo dije a Bukaneros. Por eso esta temporada es más complicada que otras. No doy ni quito la razón, pero es una pelea en la que no tengo nada que ver", comentó Jémez.
"Es una gran pena, porque es un campo al que se invitaba a ir a pasar un buen rato y dentro de ese espectáculo los que llevaban la voz cantante eran los Bukaneros. Hoy en día seguimos teniendo el apoyo de nuestra gente, pero el campo no tiene nada que ver con lo de otros años. Como rayista, es una auténtica pena que pase lo que está pasando", señaló.
"Posiblemente sea una de las razones por las que el año que viene yo no siga aquí. No quiero estar en un sitio que es una guerra continua. Esto son hostias para un lado y para otro. Esto la gente no sabe lo complicado que es, porque son piedras y piedras en el camino que tenemos que ir sacando nosotros. Esto ya cansa", declaró.
Jémez también opinó sobre el reducido grupo de aficionados que acudieron al estadio de Vallecas el pasado domingo con bufandas del Rayo Oklahoma, la franquicia con la que competirá el club madrileño el próximo año en Estados Unidos.
"En cuanto al resto, hay tontos en todos los lados, que en vez de preocuparse en venir a apoyar al Rayo apoyan al Oklahoma", concluyó.