El central argentino Martín Gastón Demichelis ha dejado el Espanyol después de fichar este verano y disputar únicamente 99 minutos en dos partidos de Liga con la camiseta blanquiazul, una actuación que le ha convertido en una incorporación prácticamente invisible para los aficionados pericos.
El futbolista, que en diciembre cumplió 36 años, llegó al club catalán procedente del Manchester City inglés, con un contrato de una temporada. Demichelis aterrizó para reforzar la defensa, la línea más débil del bloque en la campaña pasada, aunque su rendimiento nunca fue el esperado por el cuerpo técnico.
En su presentación Demichelis afirmó que no venía al Espanyol a pasearse. Quería aportar, tanto en el terreno de juego como en el vestuario, gracias a su experiencia y galones. El entrenador, Quique Sánchez Flores, reconoció que el central no estaba al mismo nivel físico que el resto y tardó en alinearle en el equipo.
Ante la ausencia de pretemporada, y pese a jugar con Argentina dos partidos en octubre, su debut se hizo esperar. El internacional se estrenó con su nuevo equipo en la novena jornada, contra el Éibar en Cornellà. No fue el debut más tranquilo posible: el equipo cedió un 0-3 en la primera mitad, aunque lo arregló en la reanudación.
El papel de Martín Demichelis se apagó entonces casi por completo. El argentino jugó nueve minutos más en la siguiente jornada frente al Betis en el Benito Villamarín. Entró en el campo en los instantes finales. Fue la última vez que se vistió de corto con la camiseta blanquiazul en partido oficial.
De hecho, el ex del Manchester City tampoco ha entrado en ninguna de las dos convocatorias para la Copa del Rey contra el Alcorcón. Esto fue un claro síntoma del escaso peso específico del futbolista en los planes del cuerpo técnico. En las últimas semanas su adiós ya se daba por hecho.
El buen momento de la defensa blanquiazul complicó la entrada de Demichelis en el once. Quique no suele modificar lo que funciona. Los números de la zaga no presentaban dudas y entre octubre y diciembre sus registros fueron destacables: el cuadro catalán mantuvo la portería a cero en ocho de nueve compromisos de Liga.
Ahora mismo, pese a que Demichelis llegó como un fichaje necesario para el Espanyol, lo cierto es que la muralla blanquiazul responde. David López, mediocentro reconvertido a central, y el mexicano Diego Reyes protegiendo con solvencia el eje. Y el costarricense Óscar Duarte también ha demostrado su calidad.